La pasión por correr transformada en acción ambiental

En las montañas de la Patagonia, un grupo de corredores está cambiando la perspectiva tradicional del trail running. Este movimiento, aunque no es masivo, busca dejar una huella significativa al fusionar la pasión por correr con un profundo respeto y cuidado por el entorno natural.

El trail running ecológico va más allá de la actividad física. Es una filosofía arraigada en la observación y el entendimiento del impacto que cada paso puede tener en el ambiente. Los corredores en esta modalidad no solo buscan recorrer kilómetros, sino también preservar la integridad de los senderos y montañas que aman.

En Bariloche, un grupo de jóvenes corredores se encuentran en pleno proceso de armado de «Nativo Trail Camp». Una experiencia comunitaria con perspectiva ecológica que tendrá lugar este año. La actividad es sin fines de lucro y representa un nuevo paradigma para los amantes del running. Dakota Jones y Nate Beder, corredores de elite mundial y miembros de Footprints, una incubadora de acción climática, han apadrinado este proyecto. Su respaldo ha consolidado esta iniciativa como el primer Campus para corredores de trail en habla hispana.

«Queremos combinar la vivencia personal y comunitaria para corredores de trail que tienen la pasión por correr transformada en acción ambiental», expresó a DIGO Felipe Collazo, integrante del equipo organizador.

No son solo palabras, estos corredores actúan. Organizan limpiezas de senderos, promueven prácticas de mínimo impacto y eventos deportivos, fomentan la conservación de los lugares a los que llaman su hogar de carrera. Están decididos a dejar cada lugar en mejores condiciones de las que encontraron.

Collazo fusiona su amor por correr con un compromiso por el ambiente. Su nombre resuena en la comunidad no solo como corredor, sino como agente de cambio que redefine la relación entre deporte y preservación de la naturaleza.

Este corredor se prepara para un desafío próximo: viajar en bicicleta desde Buenos Aires hasta San Martín de los Andes para participar en las 100 millas de Patagonia Run. “Es un viaje que tomo con la idea de concientizar sobre la huella de carbono y la posibilidad de ampliar miradas en torno a este tema», comenta.

Este viaje no es una acción aislada. «Se suma a una lista de decisiones diarias que están enfocadas en la sostenibilidad, desde la organización de eventos eco-amigables hasta la participación activa en iniciativas que promueven un estilo de vida más consciente», asegura.

En la región, junto a Agustina Buscaglia, Juampi Evinery y Clarisa Piccione decidieron organizar este tipo de eventos adoptando una mentalidad de aprendizaje constante. “Aprovechamos cada carrera como una oportunidad para profundizar su comprensión de los ecosistemas y cómo su actividad podría afectarlos», expresan.

Agustina Buscaglia es educadora ambiental y al aire libre, facilitadora de conversaciones significativas y fotógrafa de la naturaleza. Vive una vida al aire libre en Bariloche: es corredora de trail, escaladora, montañista y esquiadora.

Juampi Eviner vive en Maldonado, Uruguay, y le apasiona correr en la naturaleza: encontró en el trail running una forma de conectarse y mejorar-se. Colabora en proyectos socio educativos de distinto tipo, intentando que la accesibilidad y la inclusión sean fortalezas de cada espacio.

Clarisa Piccione desde hace 8 años trabaja en el mundo del triple impacto, desarrollándose en organizaciones que empujan por un mejor. Ha liderado espacios y talleres de co-creación de soluciones innovadoras a problemáticas sociales, a través de metodologías ágiles. es la fundadora de Clarissa Consultora, donde buscan transformar a los negocios convirtiéndolos en empresas de alto impacto, con conciencia social y ambiental.

“Queremos que correr por la montaña sea una excusa para que podamos encontrarnos más profundamente con nosotros, con el entorno natural y con otras personas, a través de formaciones, preguntas y diseños colectivos, co-mentorías y prácticas corporales», agregan los corredores.

El encuentro de este año tendrá lugar del 8 al 13 de abril de 2024 en la base del Cerro Catedral. Ofrece 15 cupos para participantes, acompañados por un equipo de 5 a 6 facilitadores.

«Vamos a explorar la crisis socio-ambiental, el diseño colectivo, la obsolescencia programada en el equipamiento, el impacto del trail running, género, equidad y diversidad, la alimentación consciente, y prácticas como el grounding y la crioterapia», anticipan los corredores.

Esta nota llega de la mano de Oscar Aliaga desde Zapala, quien comparte semana a semana su ciclo «Modo Runner» a través de la APP de RÍO NEGRO.

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