Asesinan en París al exPuma Federico Aramburu

Federico Martín Aramburu, exinternacional con los Pumas argentinos, falleció a los 42 años en la madrugada de este sábado en un altercado ocurrido en un bar parisino, informaron a la AFP fuentes cercanas a la investigación.

Los hechos ocurrieron hacia las 06H00 locales (05H00 GMT) en el bulevar Saint Germain, en pleno centro de París, en «una disputa» entre dos grupos de personas, según esta fuente policial, añadiendo que los agresores «regresaron en un vehículo y dispararon» contra miembros de la parte enfrentada.
La brigada criminal de la policía francesa ha abierto una investigación por asesinato, según la fiscalía de París, contactada por la AFP.

«Nos acabamos de enterar de la muerte de Federico Martín Aramburu en circunstancias trágicas. El conjunto del Biarritz Olympique expresa sus más sinceras condolencias a su familia, allegados y les muestra total apoyo», tuiteó este sábado su antiguo club de rugby en Francia.

Un antiguo compañero en este club, presente en el lugar de los hechos y que solicitó el anonimato, explicó a la AFP que se encontraban en el bar Le Mabillon comiéndose una hamburguesa.
«Ha habido una disputa como puede ocurrir de madrugada. Se solucionó, pero esos hombres han regresado y han disparado tres veces a Aramburu», declaró.

Federico Martín Aramburu jugó como ‘wing’ o centro en varios clubes del rugby francés: Biarritz (2004-2006), Perpiñán (2006-2008) o Dax (2008-2010).

Fue presidente de los Socios del Biarritz entre 2015 y 2018 y también formó parte del consejo de administración del club vasco con el que ganó en dos ocasiones el Top 14, el campeonato profesional francés (2005, 2006).

Aramburu también fue internacional argentino en 22 ocasiones y jugó con los Pumas el Mundial-2007, en el que el combinado sudamericano fue tercero.
Precisamente, el jugador participó como titular en el partido por el tercer puesto y anotó un ‘try’ en la victoria argentina contra Francia (34-17).

Desde que puso fin a su carrera deportiva, vivía en Biarritz, en el suroeste de Francia, y trabajaba en una empresa del sector turístico.

AFP