Denuncian al municipio de Cipolletti por abandonar la perrera de la Isla Jordán
El grupo de voluntarias que colaboran con el lugar reclama a la municipaliad medidas y el cumplimiento de las acciones prometidas en el convenio.
La alarma se desató hace unas semanas en el Refugio de la Isla Jordán a raíz de un brutal ataque en el que una perra tipo pitbull con problemas de conducta mató a otra perra sumisa en la perrera de Cipolletti.
Según contó una de las voluntarias de la Guardería Canina de la Isla Jordán, María Acosta, el hecho ocurrió por la noche, los empleados municipales que trabajan en el predio fueron comunicados y “dijeron que iban a asistir pero no lo hicieron”. Al notar la falta de proceder decidieron tomar cartas en el asunto ellas mismas. “Éramos solo 5 mujeres, un momento horrible, la perrita la mató de una manera muy violenta”, expresó.
En lo que respecta al sitio, Acosta mencionó que el predio solo cuenta con luz en algunas partes dejando sectores en completa oscuridad. No tienen la iluminación necesaria porque “está quemada hace dos meses” y desde el municipio no la han ido a cambiar, otro de los problemas es el contenedor que estuvo “meses sin vaciar”.
“Los caniles están en malas condiciones, esto hace que los perros se escapen, eso nos pasó con la perra del ataque”, señaló y agregó que “en este último tiempo ingresaron 4 animales peligrosos y no hay caniles especiales que los puedan contener”.
Desde la agrupación argumentan que esto es “una sumatoria de falencias” porque hace dos semanas atrás el personal sufrió una reducción importante. “Dejaron a una sola persona y entonces tuvimos que estar yendo a colaborar”, manifestaron.
Los más de 450 perros están a cargo de un solo cuidador. “Los perros comen mal y poco, una persona no puede con todo el lugar, es muy grande”, afirmó Acosta. “Es un sector muy complejo y necesita gente que tenga conocimiento. Creemos que el municipio envía empleados sin capacitación para hacer el trabajo en la perrera”, remarcó.
Asimismo, añadieron que desde hace un año y medio que vienen manteniendo conciliaciones pero se cansaron del incumplimiento de las promesas y accionaron legalmente. “Se firmó un acuerdo que detalla las responsabilidades de todos y por parte del municipio hay puntos que no se están cumpliendo”, precisó.
Las denuncias puntualizan en la falta de la ordenanza de cuidados responsables, sobre los criaderos y de los controles que “se tienen que hacer y no hacen” en los animales.
“Hace una semana del área de Servicios Públicos, anunciaron una guardia permanente que tendría que estar desde hace mucho tiempo”, apuntó. Con respecto a la atención veterinaria la calificó de «muy básica» para lo que les prometieron.
La adopción como solución
Una de las soluciones que proponen desde la agrupación es que se cierre el refugio y se consiga adopción para todos los animales. «Las perreras fomentan el abandono y la irresponsabilidad», argumentó Acosta.
Por otro lado, que desde la municipalidad se invierta el presupuesto que tiene para Zoonosis en propaganda para concientizar a la sociedad. “Ellos tienen que trabajar para promover las adopciones, como lo hacemos nosotras”, concluyó.
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