Música para Volar presenta en Neuquén un nuevo viaje con Charly, Fito y Soda

El proyecto de músicos rosarinos vuelve a la región este fin de semana para ofrecer dos shows diferentes en Neuquén y Bariloche, donde presentará un espectáculo ilustrado con el universo cinematográfico de Stanley Kubrick.

Música para Volar, el proyecto rosarino que interpreta la obra de las principales composiciones del rock argentino, regresa a la región para ofrecer dos espectáculos diferentes en dos ciudades diferentes: este viernes, en una doble función, a las 21 y a las 23, en el Cine Teatro Español de Neuquén ofrecerán el tríptico “Soda Charly Fito”, un recorrido por la obra de estos tres pilares de la música de la música popular argentina con arreglos originales para cuerdas y vientos.

Y el domingo, a las 20, en el gimnasio María Auxiliadora, de Bariloche, con el impresionante Soda Uplugged + Kubrick, un espectáculo que combina el célebre show acústico de Soda Stereo en la MTV con imágenes del universo cinematográfico de Stanley Kubrick. Las entradas para ambos shoes, en venta a través de ticketway.com.ar y desde el sitio linktr.ee/mpvolar.


La novedad en esta ocasión es la música de Fito Páez, una propuesta que hasta ahora no habían traído nunca al Alto Valle. “Lo de Fito es verdad que es nuevo, relativamente nuevo”, cuenta Bruno Moreno, pianista y arreglador de Música para Volar en una entrevista con Diario RÍO NEGRO. “Empezamos a trabajar repertorio de Fito el año pasado, en principio por placer, por el solo placer de tocarlo en la sala de ensayos, en algunos momentos libres. Y como hacemos siempre, nos acercamos a un compositor más lúdicamente y después ya empezamos a estudiarlo en profundidad”.


De esta forma, la música de Fito Páez se incorpora al repertorio del mismo modo que lo hicieron con Soda en su momento y que le dio sentido al proyecto,. Después, incluyeron a Charly García y a Luis Alberto Spinetta, que no es parte de estas giras, y ahora se suma a Fito también como parte de un repertorio estable. Tratándose de Música para Volar no es extraño que el repertorio del autor de “11 y 6” comience a ser recorrido de múltiples formas. Por lo pronto, veremos de qué irá la cosa este viernes.


Y, como suele suceder con este proyecto de músicos rosarinos tan queridos por aquí, estarán acompañados por músicos de la Sinfónica de Neuquén, En esta ocasión, como las canciones fueron arregladas para cuerdas y vientos, los acompañarán Juan Pablo Bergese, en trompeta; Nehemias Borgogno, en trombón; Guillermo Vera, en saxo; Oswaldo Corro, en chelo; y Sol Nardozza, en violín.

La música de Fito parece tan simple a veces, pero cuando te metés dentro es maravillosamente compleja”.

Bruno Moreno, pianista y arreglador de Música para Volar


Bruno Moreno es el cerebro musical que da forma a los arreglos que interpreta Música para Volar. En el caso de la música de Fito Páez, advierte que “Fito ha tenido muy buenos arregladores. Creo que de los tres es el tipo que más ha trabajado ese aspecto. Charly no tiene tantos arregladores por fuera de él porque creo que el arreglador es él mismo y te diría que Cerati también. Pero Fito ha sido alguien que ha incorporado la figura del arreglador para su música. Por ejemplo, Carlos Villavicencio, que fue su arreglador en los ‘90. También trabajó con Gerardo Gandini. Quizás porque, de los tres, Fito es quien más orquesta le metió a sus canciones. De hecho, Euforia es un sinfónico”.


Fito es un músico cuya canciones muchas veces ya tienen los arreglos de origen, su música ya tiene arreglos escritos. Para Bruno Moreno es todo un desafío no repetir, pero tampoco “querer inventar la pólvora”: “En esos casos voy buscando la vuelta, voy a esas fuentes, aprendo y algunas cosas las invento y otras las adapto”.


Por ejemplo: “Hacemos un arreglo de Un vestido y un amor original porque Fito que tiene la formación de trío de vientos y dúo de cuerdas que nosotros presentamos. Y yo la hice. Y obviamente cuando la hice puse la oreja, porque además Fito grabó millones de versiones con Gandini, con Villavicencio, sin ninguno de los dos (risas)”.


La cantidad de temas de cada uno está repartida en tercios, pero no de modo temático ni por época. ¿Entonces? “Entonces, el criterio fue por la onda de las canciones o por cómo las instrumentamos”


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