Cruzó el semáforo en rojo, chocó y mató: lo condenaron a 3 años y medio de prisión
Walter David Mejia, de 38 años, manejaba una camioneta Dodge Ram, y fue condenado a tres años y seis meses de prisión efectiva por el homicidio de Gabriel Vergara. Lo chocó cuando circulaba en moto en Cipolletti.
El conductor de una camioneta Dodge Ram quedó tras las rejas en un fallo de la Justicia penal de Cipolletti. Fue condenado a tres años y seis meses de prisión efectiva por el homicidio de Gabriel Vergara, que circulaba en moto y fue embestido por el condenado.
Un testigo confirmó que vio al imputado cruzar el semáforo en rojo, en la esquina de Miguel Muñoz y 9 de Julio. En ese contexto atropelló a la víctima, realizó maniobras de “desenganche” y se escapó.
El acusado argumentó que sintió el impacto, siguió y sostuvo que nunca escuchó la persecución de la policía.
No obstante, el juez Julio Sueldo valoró las pruebas y destacó la declaración del testigo ocasional, que no tiene ningún interés directo en el caso.
Motociclista murió después de fuerte choque
“Su relato fue claro, categórico, armónico y sin fisuras, describió como venía caminando por arteria Miguel Muñoz, que presenció el accidente a tres o cuatro casas de distancia, y que tenía el semáforo delante, que aunque en el sector hay árboles, lo observó directamente, y que estaba en rojo «para la camioneta» «y en verde para la moto», dice el fallo.
Por eso consideró “demostrado», a partir de ese testimonio, que nadie bajó del vehículo, y que «el conductor de la camioneta, inmediatamente de producido el impacto, realizó maniobras hacia atrás y hacia adelante, hasta que el rodado menor se desenganchó», y que acto seguido «siguió circulación a mayor velocidad», alegó el magistrado.
Walter David Mejia, de 38 años, fue condenado a la pena de tres años y seis meses de prisión efectiva, más diez años de inhabilitación para conducir vehículos. La calificación legal fue de homicidio culposo ocasionado por la conducción imprudente y antirreglamentaria de un automotor.
El juez valoró en su contra que Tras el choque realizó maniobras para desenganchar el vehículo menor, y que intentó fugarse para ser detenido por personal policial ya alejado del lugar del hecho.
“Una absoluta falta de empatía hacia la situación de su víctima”, expresó en la sentencia.
El fiscal Martin Pezzetta, que participó en el juicio, recordó que el siniestro fue antes de la reforma del Código Penal, que agrava las penas por los homicidios culposos. Además sostuvo que desde el Ministerio Público Fiscal se opusieron a que se otorguen beneficios procesales como la suspensión de juicio a prueba, algo que fue solicitado por la defensa del imputado.
El hecho ocurrió el 3 de abril de 2015, de madrugada. Se trata de un fallo de primera instancia, que aún no está firme porque puede ser apelado. Además de la fiscalía y la defensa, en el caso intervino la familia de la víctima como querellante.
Comentarios