Copahue: las explicaciones del aumento de su actividad

Por qué el volcán Copahue aumentó su actividad es la pregunta que deberán responder los organismos encargados de su control y las teorías son dispares. En Argentina, lo vinculan al sistema hidrotermal. En Chile, le suman el efecto del sismo del domingo. Los locales disienten, nadie tiene certezas y, aunque el macizo permanece calmo desde el miércoles, el alerta naranja (ver aparte) se mantendrá para obtener más información.

El Copahue tiene características especiales, que lo llevaron a encabezar el ranking de riesgo volcánico que elabora el Observatorio Argentino de Vigilancia Volcánica (OAVV) que depende del Servicio Geológico Minero de Argentina (Segemar).

El jefe de este organismo, Sebastián García, explicó que el volcán merece una estación especial porque tiene una localidad muy cercana, a unos ocho kilómetros de distancia. Se trata de Caviahue-Copahue, con una población estimada de 1.000 personas, cifra que se eleva con la llegada de turistas a las termas y al centro de esquí.

Además, es el volcán más activo del país porque, cada cierta cantidad de años, hace erupción. Desde la del 2012 se han registrado sismos o emisión de gases y cenizas.
Pero esta semana, esa actividad aumentó y, después de cuatro años, se volvió a elevar el alerta a naranja para el monitoreo y a color amarillo para Defensa Civil.

En Caviahue repasaron los protocolos de evacuación, que fueron simulados en 2016 y 2017 por toda la población y el año pasado sólo por las instituciones, detalló el subsecretario provincial de Subsecretario de Defensa Civil, Martín Giusti, quien resaltó que para los vecinos la vida continúa de forma habitual.

El Segemar y su par de Chile reforzaron el monitoreo, pero hay un punto en el que no coinciden. Desde el país trasandino hablan de dos procesos, uno del magma en sí y otro vinculado al temblor que tuvo una magnitud de 6,6°.

Desde Argentina desconfían: “han habido casos, pero con sismos más fuertes”, resaltó García. Consideró que lo que ocurre en Copahue es una dinámica propia del volcán. Explicó que, en marzo, ingresó magma que interactuó con el agua termal, causó movimientos internos y un alerta a amarillo. En ese momento, el Segemar interpretó que la sismicidad indicaba que había un volumen no muy grande de magma que iba ascendiendo.

Ahora, hubo más sismicidad que la que se venía dando, lo que indicó un cambio en la actividad y dio paso a que se elevara el color de nuevo.
Para el organismo argentino esta modificación, probablemente, sea provocada por magma en la profundidad que está instruyéndose y ascendiendo hasta la superficie. A medida que va subiendo, interactúa con el sistema hidrotermal, o sea el agua debajo del volcán, y se generaran gases o cenizas. En el caso de Copahue hay un balance entre el magma que calienta el agua y el agua que enfría al magma. Esa “pelea” que hay entre los dos factores es lo que controla su actividad. “No implica que va a haber una erupción el día de mañana, tampoco lo podría desestimar porque para eso es el monitoreo, el seguimiento en el día a día”, resaltó el geólogo.

De esta forma y aunque en los últimos días no hubo novedades, el control diario se extenderá por unos 15 días, brindando más información y tal vez, la respuesta a qué pasa dentro del volcán.

1.- Erupción del 2012
Se reactivó después de 11 años y comenzó a registrar sismos y emisiones.

2.- Evacuación del 2013
El 27 de mayo se declaró la alerta roja y las poblaciones cercanas fueron trasladadas.

3.- Alerta naranja en 2015
Se mantuvo por dos semanas y fue la última de este color hasta la actual.

4.- Alerta amarilla en 2018
La motivó la emisión de una columna de ceniza. Defensa Civil mantuvo la verde.

5.- Otra alerta naranja
Fue declarada el lunes 30 por el registro de un incremento de la actividad.

Por Victoria Terzaghi

La nieve ya había copado las calles de Caviahue y la población se preparaba para la temporada alta de turismo, a fines de mayo de 2013, cuando el gobierno provincial tomó una decisión de peso. Ante el incremento de la actividad del volcán Copahue ordenó la inmediata evacuación de todo el pueblo.
Casi con lo puesto, la gente salió de sus casas dejando tras de sí -por las órdenes dadas- incluso a sus mascotas. Un puñado de vecinos se negaron a acatar la orden y fueron el centro de los cuestionamientos de las autoridades que hicieron base en Loncopué, el pueblo que recibió a gran parte de los evacuados quienes, ante el colapso de la escasa hotelería, debieron albergarse en el regimiento militar de Las Lajas.
El volcán había escupido cenizas a mansalva apenas cinco meses antes. Sin señales de alerta claras, o al menos no recibidas por Neuquén, una columna eruptiva de gases y cenizas se elevó por kilómetros en diciembre de 2012.
Fue por eso que cuando en mayo la actividad sísmica se disparó y desde el Sernageomin chileno se elevó el nivel de alerta a rojo, el gobierno tomó la medida más drástica como es la evacuación forzosa de todo un pueblo.
De inmediato se anunció que se comenzaría a estudiar el volcán desde Argentina, con la instalación de equipos, e incluso desde el gobierno nacional acudió el secretario de Seguridad, Sergio Berni, a atestiguar la evacuación.
Finalmente el volcán, que permaneció oculto tras las nubes en todos esos días, le terminó dando la razón al puñado de vecinos que se negaron a evacuarse. Los vecinos pudieron retornar a sus hogares para reencontrarse con sus mascotas que habían quedado a la buena de Dios, dado que fiel a su impredecible desarrollo el volcán no hizo ninguna erupción.
En la población de este pueblo de nieve quedó la sensación de que se actuó para la tribuna a costa de su padecimiento, y hoy señalan que a 6 años de ese episodio el monitoreo argentino del volcán sigue siendo casi nulo.

Actualmente, el volcán Copahue está en alerta naranja, pero la población cercana rige un alerta amarilla. Esto significa que hay un criterio distinto para los organismos que monitorean de los que se encargan de la defensa civil.
De acuerdo a la actividad de cada volcán, se establece una posible evolución y aumenta la frecuencia de reportes.
En paralelo se modifica el alerta civil, que implica que los vecinos presten más atención a los informes oficiales y una posible restricción de acercamiento al cráter.

Alerta verde
Sin variación en la actividad. No hay peligro para la población y los reportes son mensuales.

Alerta amarilla
Actividad inestable, con explosiones menores y fumarolas. La población debe mantenerse atenta.

Alerta naranja
La variación de la actividad es significativa. Los reportes son diarios.

Alerta roja
Podría haber una erupción. Posible evacuación de localidades cercanas.