Con imágenes y testimonios rescatan el Choconazo

Una de las protestas obreras más significativas para la región fue el Choconazo. El hecho fue objetivo de estudio para los académicos y para los medios, pero no cuenta con un espacio fijo donde se lo recuerde. Con ese objetivo desde la Universidad Nacional del Comahue (UNC) se realizó un proyecto para recuperar fotos, digitalizarlas y mostrar este hito de la historia neuquina.

“La intención es insistir en la recuperación de la memoria histórica y no hay lugar hoy de conmemoración de eso”, explicó el profesor Juan Quintar quien comanda el proyecto desde la UNC y quien recopiló el material fotográfico.

Nahuel Guerrero, Fernanda Sandoval y Virginia Tano son estudiantes avanzados del profesorado de Historia que con el acompañamiento de la profesora Emilia Soria digitalizaron unas 150 fotografías. Fue un trabajo arduo de más de cuatro meses.

“Armamos una base de datos donde está la descripción de cada fotografía, qué año, qué fuente, qué personajes hay en ella y la idea es eso después subirlo a la web”, contó Tano.

Por su parte Guerrero destacó que el proceso les permitió descubrir cómo “en cada foto hay multiplicidad de actores, muchos de ellos fueron ocultados como el papel de las mujeres, de los niños y la incipiente Iglesia que se acercaba a los trabajadores”.

“Los obreros que construían la obra tenían muchos problemas de hacinamiento, de condiciones de trabajo, hubo muertes y tenían representación gremial asociada a la empresa”, narró Quintar que publicó hace 19 años el primer libro sobre el tema.

El trabajo académico indica que a fines de 1969 los trabajadores eligieron a sus representantes “y va a ser el comienzo de un fuerte conflicto. Fueron reconocidos por la empresa pero los esperaron con la Policía Federal”. Fue el punto de inicio de una huelga que continuó hasta marzo de 1970.

Las fotografías que se recopilaron pertenecen al archivo del Diario Río Negro y de personas que prestaron imágenes que tenían. Entre ellas brindó material Sara Garodnik, una de las mujeres que acompañó la huelga. “Las tenía enterradas en el patio de su casa para evitar que las encuentren durante la dictadura”, reveló Quintar.

La otra etapa del proyecto planea un trabajo en conjunto con el museo de El Chocón y de Senillosa para que el año que viene haya una muestra estable.