Cayeron los ingresos de GeoPark en el país

El congelamiento, la caída de precios y las condiciones del mercado local perjudicaron a la firma. Las reservas también mostraron una contracción respecto a los estudios del 2018.

GeoPark, la petrolera independiente enfocada en Latinoamérica, registró caídas interanuales en los ingresos por las ventas de petróleo y gas durante el 2019. Al igual que el resto de las operadoras en Argentina, la compañía no le fue fácil sortear la crisis del año pasado.

En la presentación de resultados anuales, la petrolera anunció que los ingresos por ventas de petróleo cayeron un 30% respecto al 2018 y cerraron en 6,5 millones de dólares. Además, también se redujeron las entregas en un 9% al comercializar 1490 barriles de petróleo por día.

Según argumentó la compañía, uno de los principales factores fue la caída en el precio del petróleo en el mercado interno. “La caída en los precios fue de un 23% a 47,8 dólares por barril, más bajos que los precios del Brent en respuesta a los controles locales del precio del petróleo implementado durante 2019”, dice el comunicado de Geopark que hace alusión al Decreto 566 con el que la administración de Mauricio Macri congeló el precio de los combustibles y el barril.

En el segmento del gas, el escenario fue similar. La firma anunció una caída del 22% en los ingresos por ventas de gas por menos entregas y un desvalorado precio. Sobre estos resultados, la firma confirmó que los precios cayeron un 21% producto de las “condiciones de mercado locales”.

La buena noticia para Geopark es que, a pesar del mal segundo semestre que cerró la industria petrolera local, lograron reducir los costos operativos. La firma anunció que, en el último cuarto del año, el costo por barril equivalente bajó de 34,4 dólares a 26 dólares interanual. En total, el costo operativo al cierre del año fue de 4,9 millones de dólares, mientras que un año atrás fue de 7,1 millones de dólares.

En números

30%
es lo que cayeron los ingresos por venta de petróleo en el último cuarto. El principal factor fue el congelamiento.

A nivel global, la compañía logró mantener un flujo de caja positivo al registrar US$ 85,7 millones antes de intereses, impuestos y amortización (Adjusted Ebitda), una suma similar a la obtenida en 2018. La diferencia es que en 2019 la firma adquirió los activos de Amerisur Resources dónde invirtió cerca de 314 millones de dólares.

Si se miran los resultados en detalle, se ve que, en Colombia, Chile y Brasil, la compañía registró un Ebitda positivo, sin embargo, en Perú, Ecuador y Argentina (1,9 millones de dólares) fue negativo.

Las reservas en picada

La petrolera también realizó en febrero una nueva certificación de reservas de todo su portfolio en el continente y, si bien mostró un incremento en Colombia, en Argentina se desplomaron.

El estudio que realizó la firma en 2018 mostró que las reservas probadas y probables en el país eran de 14 millones de barriles equivalentes de petróleo, pero el último informe mostró una abrupta caída que cerró en 8,5 millones de barriles equivalentes.

Según aseguró la operadora, los resultados reflejan revisaciones técnicas, atrasos en los planes y la producción de menos de un millón de barriles equivalentes en 2019.


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