Casas cálidas con mínimo gasto de energía

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La inminente llegada del invierno y los anuncios de aumentos superiores al 100 por ciento en el costo del gas domiciliario motivan la charla que brindará el próximo sábado a las 17 el doctor en física Alejandro González en el aula magna del CRUB de la Universidad del Comahue, en Quintral 1.250, con ingreso libre y gratuito, para informar sobre la manera de optimizar el consumo de energía, hasta en un 50 por ciento, evitando que el calor se fugue de los ambientes.

González es investigador del CONICET y estudia aspectos de la optimización de los recursos naturales, pero desde la perspectiva del usuario residencial.

Su trabajo está orientado a la mejora de viviendas a través de la rehabilitación térmica y al uso de la energía solar pasiva, como las cocinas solares, entre otros productos de uso en los hogares.

Durante su charla se referirá a la situación energética en Bariloche y sobre los aspectos físicos de la transferencia de calor, ejemplificando con casos prácticos de mejoras de viviendas. En su invitación consigna que la reducción en el consumo de energía puede superar el 50 por ciento del gasto actual, y que no se trata de un plan de ahorro, sino de una rehabilitación térmica de la vivienda, y anticipa que «una forma de aumentar la eficiencia térmica de la vivienda es agregando materiales livianos, que incluyan aire.

Estos pueden ser materiales comerciales o también fabricados por los propios usuarios, y existen muchas maneras simples de fijarlos. Los reciclados también proveen oportunidades de contribuir doblemente a disminuir el impacto ambiental y a tener una casa confortable».

El experto comentó que en Bariloche, con una temperatura media anual 8ºC, una casa promedio con gas natural gasta 4 veces más en calefacción que una similar en Estocolmo, con una temperatura media de 7ºC.

«Hasta en La Plata, con clima templado cálido y temperatura media anual cercana a los 16ºC, el consumo en calefacción de una vivienda unifamiliar es el mismo que en Estocolmo», ejemplificó.

González mencionó estudios que demuestran que la calefacción demanda más del 80 por ciento de toda la energía que se usa en una casa.

«La iluminación requiere cerca del 1 por ciento, pero pusimos las miradas en las lámparitas, para cambiarlas por las de bajo consumo. Así resolvemos el 1 por ciento del problema, pero faltaría una estrategia para comenzar a resolver el 81 por ciento que se va en calefacción, el 10 por ciento en agua caliente sanitaria, el 5 por ciento en cocción de alimentos, y el 3 por ciento en electrodomésticos».

Para el científico, «la eficiencia para mantener una casa cálida está definida por dos factores: el gasto de los combustibles, y la cantidad de calor que se escapa sin haberlo utilizado. La buena eficiencia se refiere a obtener un resultado con el mínimo de pérdidas».