Pedido por asfalto

Juliana Zaccone
Cinco Saltos

Señor Intendente Enrique Rossi:

Mi nombre es Juliana, y me dirijo a usted para plantear una situación que, como ciudadana nacida en esta localidad, me duele profundamente.

Mi abuela, Olga, llegó a este pueblo en 1945 y vivió toda su vida en la calle Ceferino Namuncurá, a pocas cuadras de la avenida Blumetti y del centro.

Hoy, con 89 años, está en silla de ruedas y despidiéndose de la vida y del pueblo que tanto ama.

Sin embargo, no puede salir a saludar a sus vecinos ni visitar a su familia cercana como le gustaría, porque la calle donde ha vivido toda su vida está completamente deteriorada.

El estado actual de las calles hace imposible transitar con una silla de ruedas. Su única posibilidad de contacto con el exterior se limita al pequeño patio de su casa.

Es doloroso volver a este pueblo, después de 10 años viviendo fuera, y encontrar que las condiciones no solo no han mejorado, sino que parecen haber empeorado.

Este no es solo un problema personal, sino una realidad que afecta a todos los vecinos que decidieron apostar por esta ciudad y que hoy no tienen acceso ni siquiera a las comodidades más básicas que merecen.

Le pregunto, con toda sinceridad: ¿cuánto más se debe esperar para que algo tan fundamental como el asfaltado de calles sea una realidad en esta zona?

En épocas de lluvia, la situación se vuelve directamente intransitable, un problema que lleva décadas sin resolverse.

Mi pedido no es solo por mi abuela, sino por todos los ciudadanos que, como ella, construyeron su vida aquí, pagando sus impuestos y contribuyendo al crecimiento de este lugar. Espero que este mensaje llegue a usted y a quienes tienen la responsabilidad de cambiar esta realidad.

Mi abuela merece, al menos en sus últimos días, poder cruzar la calle para encontrarse con sus vecinos y visitar a su familia y allegados con la dignidad que merece.

Confío en que este reclamo sea escuchado y que finalmente se tomen medidas concretas.

Los vecinos de Cinco Saltos, tanto los de toda la vida como las generaciones actuales, merecen mejores condiciones.