Censura
Si el precio de pensar y expresar e intentar defender el derecho de los argentinos a hacerlo con respeto y libremente, sin los viejos temores a represalias de un reciente pasado, es ver violentada y allanada ilegalmente la propia morada, robadas computadoras, cámaras de fotográficas, y pertenencias de valor; entonces debo concluir que ese pasado jamás se ha ido. Me duele esta intolerante y torpe Argentina.
Karina Zerillo Kazzaro
DNI 21.653.863
MAR DEL PLATA
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