Carrió «maravillada» con Bergoglio
Sacó a relucir su chapa de "cristiana y militante". Elogió al cardenal y trató a K de "personaje menor".
La titular de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, respaldó ayer al cardenal Jorge Bergoglio en la polémica con el Gobierno, al afirmar que está «maravillosamente representada» por el prelado, y dijo sentir «profunda pena» por el presidente Néstor Kirchner.
«Yo soy una militante cristiana, soy una liberal de izquierda cristiana y, en consecuencia, formo parte de una Iglesia militante, y me alegra muchísimo, me encanta ser perseguida, porque es signo de buenaventuranza», manifestó Carrió.
La diputada, artífice de la fórmula Telerman-Olivera en la Ciudad, dijo además que «me encanta tener un pastor como Bergoglio en Buenos Aires, que no negocie la verdad». «Si hay muchos que no negocian la verdad y que se bancan la persecución, me parece bien. Todo lo otro es lectura menor de personas menores», dijo la legisladora aludiendo a Kirchner.
Se refirió así a la polémica que mantiene Kirchner con Bergoglio, luego de que ayer ambos cruzaran, aunque sin nombrarse, duros términos con el escenario electoral porteño como telón de fondo.
El titular del Episcopado -a quien se le asigna haber intervenido en favor del apoyo de la Coalición a la candidatura de Jorge Telerman- afirmó, en la misa de apertura del plenario de obispos, en Pilar, que «la Iglesia fue, es y será perseguida».
En tanto, Kirchner acusó a los obispos de «no querer poner a veces la otra mejilla», como lo hizo Cristo y como, según dijo, «nosotros estamos dispuesto a poner una mejilla, otra mejilla, el corazón, la espalda, siempre».
El gobierno bajó ayer el tono al cruce, mientras la Iglesia analiza un posible pronunciamiento sobre el contexto electoral del país.
El ministro del Interior, Aníbal Fernández, dijo no sentir «una colisión» con la ley. «Yo no tengo la estatura intelectual ni el conocimiento del dogma como para poder refutar lo que dice el cardenal primado de la Argentina», respondió Fernández.
Bergoglio advirtió el lunes que la persecución toma forma de «desinformación, difamación y calumnia», e instó al plenario de obispos a no «negociar la verdad» y tampoco a «no ceder al miedo de dar testimonio».
Durante la segunda jornada de la 93 Asamblea Plenaria del Episcopado se evaluó ayer un borrador de documento referido al contexto eleccionario del país. Si bien no se decidió todavía su difusión el sábado, varios obispos sumaron propuestas y otros objetaron la conveniencia de hacerlo en un clima de tensión con el gobierno.
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