Buscan alternativas para impulsar a los artesanos de Bariloche
Un proyecto de ordenanza busca ofrecer canales de comercialización para los microemprendedores y artesanos que han sido fuertemente golpeados por la crisis que generó la pandemia.
Se debate una ordenanza para generar puntos de venta para productos artesanales y de microemprendedores de Bariloche. Foto: Chino Leiva
Los concejales de Bariloche llevarán a sesión la próxima semana un proyecto que busca ofrecer canales de comercialización para los microemprendedores y artesanos, que genera controversia y no tiene -hasta el momento- los votos garantizados para su aprobación.
La iniciativa fue presentada en septiembre del año pasado por la concejal del Frente de Todos Roxana Ferreyra y tiene el apoyo de grupos de emprendedores, entre ellos Ecosureños, que nuclea a 240 productores de la economía social.
Pero la extensión de la deliberación en comisiones motivó esta semana que la propia autora pidiera que se defina de una vez su aprobación o rechazo en sesión, por eso se dictaminó en la Comisión de Gobierno y Legales con el voto en reserva de los concejales de Juntos Somos Río Negro.
Ferreyra explicó en la comisión que el proyecto incorporó sugerencias y modificaciones, entre ellas la creación de una “mesa de concertación” para definir políticas de estado en materia de microemprendimientos.
“El objetivo del proyecto no es detenernos en un artículo sino en el proyecto en general que es acompañar a los microproductores, artesanos y a los que brindan servicios, acompañándolos en un momento bastante complejo”, dijo la concejal del FdT quien remarcó que este sector es uno de los más golpeados por la crisis que generó la pandemia y que tuvo escasa respuesta por parte de los estados nacional, provincial y municipal.
Gustavo Hernández del grupo Ecosureños participó de la comisión y remarcó la necesidad de que se apruebe la ordenanza para “darle un marco legal a cosas que suceden de hecho y algunas nuevas que beneficiarían muchísimo al sector artesanal y emprendedores”.
Los concejales de Juntos, Carlos Sánchez y Gerardo Ávila, se reservaron el voto en el dictamen. La mayor objeción está vinculada a los beneficios fiscales que la norma pretende imponer para los comercios que ofrezcan puntos de venta de los productos hechos por manos locales. También molestaría la definición de políticas en esta materia.
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