Boca se distrajo y perdió dos puntos

Ganaba 2 a 0 sin jugar del todo bien. En una ráfaga, Lanús llegó a la igualdad.

Boca ni siquiera supo administrar la repentina ventaja que obtuvo en la etapa inicial, cuando se colocó dos tantos arriba. Sólo por momentos logró desplegar un juego homogéneo ante un Lanús que insinuaba únicamente con el habilidoso Rodrigo Díaz. Con el desarrollo del encuentro a su favor, desperdició la chance de arrancar con una victoria. Gago y Ledesma le aportaron aire fresco y elegancia al mediocampo, pero cometieron errores propios de la inexperiencia, desestabilizando de a ratos el funcionamiento del equipo. Sin embargo, Cagna se encargó de equilibrar esa cuestión mientras estuvo en la cancha. La primera media hora de juego fue deslucida, con numerosos errores e imprecisiones. Donnet, en la función de enlace, se perdió y tocó contadas veces el balón, lo que dificultaba aún más la elaboración. La formula del conjunto de Jorge Benítez volvía a ser, otra vez, la misma que en la época de su antecesor, Miguel Brindisi. Barros Schelotto recibíó abierto por la derecha e intentaba el desborde. Cuando lograba su cometido, todo resultaba en vano ya que sus centros caían pasado el segundo palo y Palermo entraba por el medio. La dupla atacante conectó una vez en una pared en la puerta del área que terminó con una falta al Mellizo. Luego fueron puro desencuentro. La primera oportunidad clara del partido fue para Boca y partió de un pase de Gago para Cagna, quien quedó mano a mano con Bossio pero resolvió mal. Boca no encontraba el camino para quebrar la resistencia de los dirigidos por Néstor Gorosito. Los laterales no aportaban sorpresa y no había improvisación. Pero de pronto Cagna intentó con un remate desde afuera del área, la pelota rebotó en Gioda y se metió de emboquillada por encima de Bossio. La carambola se transformó en una fatalidad para Lanús, que se desarmó y quedó entregado en el tramo final de la primera etapa. La levantada de Boca coincidió con el gol y con el ingreso del juvenil Escalada por Donnet (lesionado). El panorama se aclaró y los espacios comenzaron a aparecer. Baiano se proyectó con insistencia hasta que en una de sus escapadas recibió un pase de Guillermo y cayó en el área. El “Mellizo” remató el penal y Boca se fue al descanso con dos goles de ventaja.

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