Boca apela a su localía, Atenas a su experiencia 22-6-03
Hasta ahora no se sacaron ventajas cada vez que jugaron de locales. Boca abrió la serie en la «Bombonerita» y viajó tranquilo a Córdoba. Atenas le devolvió gentilezas en el «Cerutti» y ahora todo está como al principio. Esta tarde, desde las 19, se medirán nuevamente en el micro estadio «Luis Conde», donde los «xeneizes» no conocen de derrotas este año. El viernes, Atenas, con un segundo tiempo espectacular logró la paridad al ganarle en el polideportivo cordobés por 100 a 92, no sin antes pasar por momentos de clara superioridad visitante. En los dos primeros partidos Boca marcó diferencias en el juego y el marcador e hizo pesar su plantel más largo. Mientras, en Córdoba, Atenas se quedó con los dos viniendo desde atrás y demostrando un gran corazón, temple y actitud para revertir un resultado adverso. El «griego» ya no tiene a Marcelo Milanesio, Wálter Herrmann y Leonardo Gutiérrez, por nombrar a los jugadores pilares de anteriores campañas, pero mantiene viva esa mística y esa mentalidad ganadora que lo llevaron a lograr grandes éxitos, no sólo a nivel doméstico sino también en el ámbito internacional. Antenoche, con esa garra y esa actitud que le aportó Bruno Lábaque, la experiencia y la aparición en toda su dimensión del «Pichi» Campana y lo que dieron Diego Lo Grippo, Quince Alexander y Matías Lezcano, quien falló en el goleó, pero en cambio sumó marca y recuperó muchos balones, edificó la épica victoria. El inteligente manejo que hizo desde el banco Oscar «Huevo» Sánchez fue otro de los puntos altos de los cordobeses, que llegaron ayer a Buenos Aires con el animó retemplado y pensando que esta vez se le puede ganar a Boca, en la inexpugnable «Bombonerita». Boca siempre aparece como superior, pero la irregularidad de su juego, las muchas pelotas perdidas y la falta de un conductor confiable, fueron puntos negativos a la hora de la definición. El equipo porteño saca ventajas de diez y once puntos, pero no las puede mantener, debido a que no hace un juego de control, no selecciona bien los lanzamientos y da un gran déficit en la marca de la media cancha, donde Atenas estableció las diferencias, fundamentalmente en el tercer y cuarto juegos. El resultado de está final se presenta incierto, porque los dos lograron mantener la localía y también porque ambos mostraron irregularidad en su rendimiento. Para este quinto partido, seguramente no cambiarán muchos los planteamientos, ya que los dos se conocen mucho y no se pueden realizar grandes innovaciones tácticas. Boca intentará marcar en forma presionante y desgastar a los jugadores de Atenas, y aprovechar la posibilidad que tiene de hacer continuos recambios, por tener un plantel mucho más largo. Atenas, con la lógica presión de jugar de visitante, pero sabiendo que cuenta con material humano y capacidad para salir de situaciones incomodas y, con ese espíritu que lo caracterizó siempre, tratará de pegar un «zarpazo», ganar y ponerse a tiro del Bicampeonato y su octavo título. A la final llegaron los dos mejores y están demostrando que cualquiera que logre ganarla será un digno campeón. (AR/Télam)
Voces:
«Podemos ser bicampeones»
Bruno Lábaque fue sincero al referirse al quinto partido de la serie final con Boca, que se jugará hoy, y destacó que «dos veces se nos escapó el triunfo en la «Bomnbonerita», uno en la fase regular y el otro el primero de esta serie, pero creo que ahora se nos puede dar». «Si jugamos como lo hicimos en Córdoba, Atenas puede ser bicampeón», reconoció el base del equipo «griego». Por su parte, en Boca, el alero Roberto Gabini, afirmó que «se viene un partido clave, ya que si ganamos creo que iremos a jugar con otra mentalidad a Córdoba y allí podremos festejar el título».
Hasta ahora no se sacaron ventajas cada vez que jugaron de locales. Boca abrió la serie en la "Bombonerita" y viajó tranquilo a Córdoba. Atenas le devolvió gentilezas en el "Cerutti" y ahora todo está como al principio. Esta tarde, desde las 19, se medirán nuevamente en el micro estadio "Luis Conde", donde los "xeneizes" no conocen de derrotas este año. El viernes, Atenas, con un segundo tiempo espectacular logró la paridad al ganarle en el polideportivo cordobés por 100 a 92, no sin antes pasar por momentos de clara superioridad visitante. En los dos primeros partidos Boca marcó diferencias en el juego y el marcador e hizo pesar su plantel más largo. Mientras, en Córdoba, Atenas se quedó con los dos viniendo desde atrás y demostrando un gran corazón, temple y actitud para revertir un resultado adverso. El "griego" ya no tiene a Marcelo Milanesio, Wálter Herrmann y Leonardo Gutiérrez, por nombrar a los jugadores pilares de anteriores campañas, pero mantiene viva esa mística y esa mentalidad ganadora que lo llevaron a lograr grandes éxitos, no sólo a nivel doméstico sino también en el ámbito internacional. Antenoche, con esa garra y esa actitud que le aportó Bruno Lábaque, la experiencia y la aparición en toda su dimensión del "Pichi" Campana y lo que dieron Diego Lo Grippo, Quince Alexander y Matías Lezcano, quien falló en el goleó, pero en cambio sumó marca y recuperó muchos balones, edificó la épica victoria. El inteligente manejo que hizo desde el banco Oscar "Huevo" Sánchez fue otro de los puntos altos de los cordobeses, que llegaron ayer a Buenos Aires con el animó retemplado y pensando que esta vez se le puede ganar a Boca, en la inexpugnable "Bombonerita". Boca siempre aparece como superior, pero la irregularidad de su juego, las muchas pelotas perdidas y la falta de un conductor confiable, fueron puntos negativos a la hora de la definición. El equipo porteño saca ventajas de diez y once puntos, pero no las puede mantener, debido a que no hace un juego de control, no selecciona bien los lanzamientos y da un gran déficit en la marca de la media cancha, donde Atenas estableció las diferencias, fundamentalmente en el tercer y cuarto juegos. El resultado de está final se presenta incierto, porque los dos lograron mantener la localía y también porque ambos mostraron irregularidad en su rendimiento. Para este quinto partido, seguramente no cambiarán muchos los planteamientos, ya que los dos se conocen mucho y no se pueden realizar grandes innovaciones tácticas. Boca intentará marcar en forma presionante y desgastar a los jugadores de Atenas, y aprovechar la posibilidad que tiene de hacer continuos recambios, por tener un plantel mucho más largo. Atenas, con la lógica presión de jugar de visitante, pero sabiendo que cuenta con material humano y capacidad para salir de situaciones incomodas y, con ese espíritu que lo caracterizó siempre, tratará de pegar un "zarpazo", ganar y ponerse a tiro del Bicampeonato y su octavo título. A la final llegaron los dos mejores y están demostrando que cualquiera que logre ganarla será un digno campeón. (AR/Télam)
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