Blatter y su guiño a Sudamérica
opinión
Por EZEQUIEL FERNÁNDEZ MOORES
Aún saliendo sexta entre las diez selecciones que juegan las eliminatorias, Argentina tendrá chances de jugar el Mundial de 2014. La FIFA decidió ayer en Zurich que Sudamérica mantendrá 4,5 plazas, como en Sudáfrica. Pero el Mundial se jugará en Brasil, que tendrá plaza directa, por lo que su puesto no contará en la eliminatoria, en la que siempre ocupa un lugar. Su plaza quedará libre, por lo que el quinto clasificado, esta vez, tendría también boleto asegurado a la Copa. Esto correría a su vez las chances de ir al Mundial a la selección que llegue sexta en la eliminatoria. Y esta selección, mejor aún, tendrá tal vez más posibilidades que antes de superar el repechaje. La FIFA resolvió ayer que el repechaje ya no estará predeterminado contra el que llegue cuarto en la Concacaf. El rival, ahora, será sorteado, por lo que podría ser el que llegue quinto en Asia o el primero de Oceanía. Clasificar a Sudáfrica, recordamos, fue un parto. El Checho Batista no debería atravesar un sufrimiento similar. Está claro que Sudamérica tendrá una eliminatoria más disputada. Todos querrán ir a Brasil, aprovechar el primer Mundial en Sudamérica después de 36 años (Argentina 78). Pero Argentina no debería sufrir otra vez. Si eso ocurre, las esperanzas de romper en Brasil el ayuno sin títulos mundiales (México 86 fue el último) serán mínimas. Especialistas europeos me comentaban orgullosos en el último Mundial la presencia de tres de sus selecciones en semifinales. Lo decían conscientes de que les será muy difícil repetir en Brasil. “La final lógica -me dijo uno de ellos- debería ser Brasil-Argentina, pero toda Sudamérica sentirá el próximo Mundial como algo muy especial”. Lo mismo se pensó que sucedería en Sudáfrica. Pero allí las selecciones africanas fueron la gran decepción. Para Sudamérica fue un éxito conservar sus plazas. La posibilidad de tener seis de sus diez selecciones en Brasil sería un gran logro. Una confirmación de que Sudamérica dará otra vez sus diez votos en bloque cuando Joseph Blatter se postule en junio para un nuevo mandato en la FIFA. Brasil, aunque el panorama hasta el momento no luce nada claro, sueña con un gran Mundial. Si así ocurre, impulsará como sucesor de Blatter a partir de 2015 a Ricardo Teixeira, presidente de su federación (CBF). El ex yerno de Joao Havelange (presidente de la FIFA de 1974 a 1998) es un gran aliado de Blatter. Su eventual elección marcaría la continuidad de los negocios que el propio Blatter defendió ayer en Zurich, jactándose del gran éxito económico de llevar el Mundial a Sudáfrica. ¿Permitirán las potencias europeas, históricamente enojadas con Blatter, no recuperar para ellas el control de la FIFA y seguir dejando que amistosos, elimiantorias y Mundiales se jueguen cómo y cuándo sea, aún con la oposición de los clubes más poderosos? Ayer, paradójicamente, el anuncio de oposición no partió de Europa. El nombre del ex crack francés Michel Platini, actual presidente de la UEFA, fue lanzado nada menos que por Pelé. O Rei quiere que Platini se presente en junio y ponga fin a Blatter. Por el momento, sólo es una expresión de deseos.
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