Bienestar animal: cómo saber qué necesita mi mascota
Para ofrecer calidad de vida a nuestras mascotas es menester conocer sus requerimientos físicos, emocionales y mentales de acuerdo a cada animal y respectivas características.
Cuando pensamos en darle bienestar y calidad de vida a nuestros perros y gatos debemos conocer con exactitud cuáles son sus necesidades básicas, para poder satisfacerlas en su justa medida.
La médica veterinaria de Allen, María de los Ángeles Pirola, afirma que esas necesidades son interdependientes entre ellas en la vida real, pero podemos agruparlas a modo didáctico de la siguiente manera:
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Necesidades físicas: disponibilidad permanente de agua fresca y potable, una alimentación adecuada, natural y consciente, controles médicos veterinarios periódicos, vacunas y desparasitaciones frecuentes. Vivir sin dolor, sin frío, ni calor.
Necesidades emocionales: Vivir sin miedo y sin ansiedad. Disponer de refugio y entorno seguro y confortable. Recibir educación y reeducación para gestionar las emociones.
Necesidades mentales: esparcimiento y paseos al aire libre y contacto con la naturaleza; caminar, nadar, correr, olfatear. Estar en contacto con otros animales de su misma especie y de otras.
Cada una de ellas dependerá de cada animal y de las distintas etapas de su vida.
“No es lo mismo un cachorro de dos meses que un viejito de 15 años, así como tampoco es lo mismo un perro que un gato”, indica Pirola. Y añade: “Cada quien con sus necesidades específicas y qué mejor que su humano responsable a cargo, esté bien informado para poder satisfacerlas adecuadamente”.
Desde la visión holística e integrativa de la medicina veterinaria, se considera que cada ser vivo es único e irrepetible, tanto en su forma de ser, en la manera de manifestar sus necesidades y de responder a las distintas terapias.
Es importante que la familia humana esté informada y consciente de cada necesidad particular, para reconocer prontamente cuando se desequilibran y así se podrá garantizar la calidad de vida de nuestros perros y gatos.
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Lograr trabajar en equipo con el veterinario de cabecera de nuestros animales y poder llevarlos a control periódicamente o a consulta por síntomas tempranos de las enfermedades es mucho más efectivo, que cuando las enfermedades ya son de vieja data.
“Como humanos a cargo de animales de compañía debemos formarnos y aprender cuál es la manera más apropiada de cuidarlos y cómo podemos ayudarlos a lograr el bienestar que tanto merecen”, concluye la experta.
Para tener en cuenta
Para los perros es muy importante contar con paseos de calidad, al aire libre y en contacto con la naturaleza respetando su ritmo, sus tiempos y energía. Usar correa larga, de 5 metros o más, da “libertad” manteniendo la seguridad. Tratar de que los paseos no sean esporádicos.
Para los gatos que no tienen acceso al patio es de vital importancia que enriquezcamos el espacio con juegos, espacios verticales y distintos rascadores que estimule su salud mental y sus ganas de jugar.
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