Bélgica pide a Cancillería que interceda ante YPF por el contrato de la barcaza
La embajada solicitó al Estado argentino que frene la decisión de la petrolera rescindir el contrato de alquiler de la barcaza que procesa el GNL. Para la firma Exmar Energy el buque representa un tercio de sus ingresos anuales.
El barco fábrica tiene un alto costo de alquiler que contrata con la caída del precio que el gas natural licuado está teniendo en todo el mundo.
Por Maximiliano Flores
El embajador de Bélgica en la Argentina, Peter Maddens, inició gestiones en los últimos días ante la Cancillería para que el Gobierno interceda ante la decisión de la petrolera estatal YPF de intentar rescindir anticipadamente el contrato que la une durante 10 años con la empresa belga Exmar Energy por el alquiler de la barcaza de licuefacción de gas natural Tango FLNG, a razón de unos USD 140.000 diarios.
De acuerdo a lo que pudo saber Energía On por fuentes del mercado, existe un marcado malestar en Bélgica por la apresurada revisión que YPF hizo de su contrato con Exmar, firmado a fines de 2018. Maddens, representante del gobierno belga en el país, declinó hacer comentarios ante la consulta de este medio.
En el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, conducido por Felipe Solá, tratan este tema como un problema entre privados.
Hace tres semanas, YPF le había comunicado a Exmar que por motivos de “fuerza mayor” debía suspender los pagos correspondientes al contrato de charteo de la barcaza flotante Tango, apostada en el puerto Ingeniero White de Bahía Blanca, Buenos Aires para la licuefacción del gas natural proveniente de Vaca Muerta para su exportación.
Aunque la petrolera estatal argentina viene intentando renegociar precios de los servicios de sus contratistas a escala general desde que el nuevo coronavirus fuera declarado pandemia, a principios de marzo, la importancia estratégica que tenía este negocio para Exmar llevó a las autoridades belgas a buscar una vía diplomática para canalizar el conflicto, que podría tener un capítulo en la Justicia de Londres, Inglaterra.
Es que en el primer trimestre de 2020, la barcaza Tango FNLG explicó el 36% del EBITDA de Exmar Energy. Luego de informar esa novedad en Amberes, en la noche del 25 de junio, al día siguiente la acción de la firma cayó un 40% y todavía no se recuperó. La cancelación final del contrato podría comprometer la posición de liquidez de la compañía belga.
En números
- 140.000
- dólares por día es lo que YPF debe pagarle a la firma por el alquiler de la barcaza fábrica durante diez años.
Lo cierto es que un negocio que fue cuestionado desde su inicio carece de un buen futuro por cuestiones estructurales del mercado de Gas Natural Licuado (GNL o LNG, por sus siglas en inglés).
A la sobreadundancia de GNL en el mundo por la entrada de Estados Unidos como oferente, además del gas que producen Qatar y Australia para abastecer la demanda de China e India (y Japón, en menor propoción), se le sumó este año una recesión mundial por el impacto de la covid-19, con lo que se deprimieron los precios de los combustibles.
Esta semana, la estatal Integración Energética Argentina (Ieasa, ex Enarsa) informó que consiguió GNL a un precio promedio ponderado de USD 2,87 por millón de BTU. Uno de los 28 cargamentos contratados este año fue a YPF y salió de Tango FLNG.
Llegó al puerto de Escobar el 4 de abril a USD 2,6586 /MMBTU, un precio claramente anti-económico para la producción de gas local, que necesita valores por encima de los USD 3 para sobrevivir.
El dato
- 2028
- a fines de ese año debería finalizar el contrato de alquiler de la barcaza de licuefacción.
La cuenta del netback arroja que para licuar alrededor de 2,5 millones de metros cúbicos por día (MMm3/d) de gas y enviarlo al exterior, YPF recibió menos de USD 1,50 /MMBTU, ya que en el medio se paga el transporte desde Neuquén hasta Bahía Blanca, el proceso mismo de enfiar hasta -160° el gas y comprimir su volumen en 600 veces para transformarlo en líquido y el transporte marítimo, a lo que se agrega también el costo de regasificación, a cargo del Estado nacional.
Para que exportar gas signifique una ecuación rentable, los precios del GNL en el mundo deberían llegar a los USD 6. El índice JKM, que refleja las compras spot en Asia, muestra que el fluido se consigue a USD 2,16 en agosto. El Henry Hub de referencia en Estados Unidos, rondó esta semana los USD 1,72 /MMBTU.
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