Bariloche: más de 100 millones de pesos en infraestructura deportiva
En poco más de 5 años, el Municipio implementó un plan para diversificar los espacios deportivos y recreativos, con el foco puesto en la salud pero también en el encuentro comunitario.
Foto: gentileza
San Carlos de Bariloche parece un lugar soñado para practicar deportes al aire libre y disfrutar del ejercicio. Pero hasta hace unos pocos años, la infraestructura urbana no estaba a la altura del lugar. La gestión actual decidió entonces apuntar la estrategia a generar más espacios de deporte y recreación de acceso libre y gratuito, como un modo de alentar a una vida más saludable y de encuentro entre vecinos.
Puede no parecerlo a simple vista por la extensión de esta ciudad -uno de los ejidos urbanos más grandes del país-, pero haciendo un recorrido por las obras concretadas en los últimos 5 años es notable el crecimiento de la infraestructura deportiva de la ciudad. Se han sumado paseos urbanos para peatones y ciclistas, plazas con juegos saludables en los barrios, un skatepark y un pumptrack que ya han sido sede de competencias internacionales, una cancha de césped dedicada al fútbol femenino y, más recientemente en el tiempo, la construcción de un nuevo gimnasio municipal y la remodelación completa del Estadio Municipal de fútbol.
La Municipalidad -a cargo desde fines de 2015 del intendente Gustavo Gennuso, que está llegando a la mitad de su segundo mandato- fue creativa también a la hora de financiar las obras, sabiendo que en general las arcas de un municipio no pueden afrontar grandes gastos en este tipo de obra pública. Con una combinación de fondos gestionados ante Nación, un buen vínculo con el sector privado y la exitosa Ecotasa, logró inyectar en 5 años más de 100 millones de pesos en espacios para el deporte y la recreación comunitaria.
Paseos urbanos: una experiencia a seguir
Quien viva o haya visitado recientemente la ciudad cordillerana, seguramente ha sido testigo de un nuevo paisaje que se ha vuelto cotidiano: los paseos urbanos. Ya en el ingreso principal de la ciudad, entrando por la ruta 237, se luce el Paseo del Este: un predio abierto y parquizado, con una excepcional vista del lago Nahuel Huapi que acompaña el recorrido de la ruta por su colectora y que con sus sucesivas ampliaciones ya alcanzó un recorrido de más de 4 km, con sendero hormigonado para peatones, ciclistas y patinadores, juegos para chicos, juegos saludables con postas de ejercicio y equipamiento urbano -bancos, cestos de residuos, señalización-. El Paseo es concurrido a toda hora -en pandemia, con las restricciones de cada etapa y mucha conciencia de los cuidados preventivos-, y alentó notablemente la práctica de la actividad física al aire libre para todas las edades.
Ante la reacción positiva de la comunidad, y de los turistas que también lo visitan, el Municipio multiplicó la experiencia: construyó el Paseo del Sur (que puede verse al ingresar a la ciudad desde la ruta que conecta la localidad con El Bolsón), el Paseo del Oeste (en cercanías de la base del Cerro Catedral) y más recientemente el Paseo de calle Río Minero, en el corazón de los barrios cercanos al Lago Moreno. Además del uso espontáneo por parte de vecinos y turistas, durante el verano 2020-2021 la Subsecretaría de Deportes de la Municipalidad implementó en algunos de estos paseos el programa Caminatas Saludables, organizando salidas gratuitas coordinadas por sus profesores.
Un aspecto interesante fue el recurso para financiar la construcción de estos recorridos urbanos, que ya demandó una inversión de más de 45 millones de pesos, con una infraestructura que continúa ampliándose al día de hoy. El dinero provino de la ya famosa Ecotasa, una novedosa herramienta que implementó el Municipio de Bariloche para generar un fondo de infraestructura turística urbana a través de un pequeño aporte que se cobra al turista al abonar su alojamiento en la ciudad. Así, obras que hubiera sido imposible costear con un presupuesto municipal promedio, ya son una realidad entre los barilochenses.
Con la Ecotasa también se financiaron dos espacios deportivos que hoy ya son conocidos incluso a nivel internacional, por haber sido sede de competencias como las que organiza la conocida marca RedBull. Se trata del SkatePark y el PumpTrack, dos pistas construidas en la Costanera céntrica de la ciudad, con un marco paisajístico incomparable, y con una inversión conjunta de más de 20 millones de pesos. Ambos espacios se han vuelto un núcleo de encuentro para la juventud aficionada a estos deportes urbanos, con sectores para principiantes, intermedios y expertos, señalización de seguridad, e incluso la provisión en préstamo de elementos de protección a cargo del Municipio para quienes no cuenten con equipo propio, además de la presencia constante de personal que asesora a grandes y chicos en el uso seguro del espacio.
Otra de las obras de infraestructura que el Municipio construyó gracias a la Ecotasa fue el acondicionamiento de la Playa del Viento, sobre el bellísimo Lago Moreno. Con una inversión de un poco más de 700.000 pesos, jerarquizó este espacio para favorecer la práctica de deportes acuáticos, incluyendo bajada de embarcaciones delimitada por gaviones (una medida de seguridad largamente solicitada por los vecinos de la zona), estacionamiento para vehículos, sector de trailers y señalización de seguridad.
Espacios para el deporte profesional
Recientemente, el intendente Gennuso anunció la refacción completa del mítico Estadio Municipal “José Antonio Jalil”, corazón del destacado fútbol barilochense, de la mano del ministro de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens, con la gestión de casi 15 millones de pesos del Gobierno Nacional.
Poco tiempo transcurrió desde la noticia, y las obras ya comenzaron: se incorporarán 244 m2 de obra nueva, para lograr mejoras integrales en el Estadio destinadas al público, a los jugadores, deportistas, periodistas y vecinos. El proyecto ya en marcha incluye la construcción de vestuarios, SUM, tribunas, espacio para árbitros, oficina, depósito-taller y sanitarios de calidad, para optimizar este espacio deportivo que convoca multitudes tanto para practicar el deporte como para disfrutarlo como espectadores.
A esto es importante sumar la nueva cancha de césped exclusiva para fútbol femenino, que se construyó junto a uno de los gimnasios municipales de la ciudad, y que busca ampliar la práctica de este deporte. Además, llevará el nombre “Ni Una Menos”, tras la votación que realizaron los clubes a través de la Liga Municipal de Fútbol Femenino de la ciudad.
La ciudad también está creciendo en cuanto a sus gimnasios. En 2020, el Municipio anunció una obra que emocionó a varios barilochenses: se retomaría la obra del célebre y postergado Gimnasio Municipal Nº 4, que había sido abandonada hacía casi 30 años. Nuevamente, al anuncio lo siguió el inicio casi inmediato de los trabajos, con una inversión de aproximadamente 20 millones de pesos, que en esta ocasión provinieron del acuerdo de concesión del centro de esquí del Cerro Catedral.
La obra comenzó en octubre, y tomaría la estructura que había quedado abandonada por todas las gestiones anteriores: una platea y algunas paredes. Siete meses después, lo que será el Centro Municipal Social, Cultural y Deportivo N°4 ya está casi terminado, y esperan concluirlo antes del invierno. Cuenta con 700 m2 distribuidos en dos plantas, y al piso principal, con sus canchas deportivas reglamentarias, le suma salones de usos múltiples para capacitaciones, talleres y exposiciones, depósitos, sanitarios con accesibilidad, kitchenets, consultorio médico, palestra de escalada, estacionamiento, deck externo y hasta espacio de co-working con WiFi gratuito. Incluso se están incorporando nuevas tecnologías, como paneles solares para generar un gimnasio sustentable que reduzca su consumo en agua y electricidad.
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