Barcos abandonados en lago Frías: el dueño da su versión
El titular de la empresa que tiene los catamaranes Dalca y Caleuche dijo que se llegó a esta situación debido a la dilación judicial en su litigio con Parques Nacionales.
El propietario de los catamaranes Caleuche y Dalca, que permanecen amarrados en el lago Frías a la espera de una resolución judicial, apuntó a un largo litigio con Parques Nacionales desde que dejó la concesión para realizar la excursión lacustre Cruce Andino en 2009.
Miguel Ángel Ricchiardi, titular de la empresa Puerto Blest SA, que fue decretada en quiebra por el juez en lo Civil y Comercial Cristian Tau Anzoátegui, dio su versión de lo ocurrido con los barcos, la causa judicial y una disputa con Parques que se originó en tribunales federales.
En un extenso escrito remitido a “Río Negro”, Ricchiardi puntualizó que las dos embarcaciones que prestaban servicio en lago Frías, “quedaron perfectamente amarradas en Aldana, en el muelle existente en el lugar, y totalmente herméticos sus compartimentos e instalaciones”. Agregó que debido a esa condición, Parques Nacionales pretendió usar el Dalca para navegar el lago, situación que el empresario recurrió mediante un amparo ante el Juzgado Federal de Bariloche.
Según Ricchiardi ante la frustración de Parques por el uso de este barco, se inició una maniobra para “desacreditar todas mis empresas, achacándoles incumplimientos inexistentes, destrucción de sus bienes e interrupción de sus concesiones”.
El empresario remarcó que el estado actual de abandono y deterioro de las dos embarcaciones “no responde bajo ningún punto de vista a un accionar dilatorio ni mucho menos a la desidia de las autoridades de Puerto Blest SA sino en todo caso a la inusitada y hasta sospechosa tardanza del órgano concursal en tomar efectivamente la posesión de la totalidad de los bienes que integraron el patrimonio de la empresa”.
Subastarán los barcos abandonados en lago Frías
Cuestionó además la síndico María del Rosario Rodríguez y apuntó a un “accionar conspirativo” en su contra por parte de la anterior conducción de la Administración de Parques Nacionales y de Prefectura. También señaló un “desmedido ánimo persecutorio de las autoridades de Parques Nacionales”.
Ricchiardi denunció además que Parques Nacionales “secuestró indebidamente el barco Santa Fe”, el que trasladó a isla Victoria, y se refirió al barco Flecha del Plata y al episodio de hundimiento parcial el que atribuyó a “manos anónimas que abrieron una tapa hermética en popa y bajo la línea de flotación”.
El texto completo del empresa Miguel Ángel Ricchiardi.
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