Barcelona – Real Madrid: un clásico sin goles y cruzado por las protestas

En la previa, el presidente de Barcelona, Josep María Bartomeu, dijo que el clásico español se jugaría sin inconvenientes y que 3.000 agentes de seguridad pública y privada garantizarían el normal desarrollo del partido entre los dos punteros de la Liga Española.
No se equivocó Bartolomeu. El encuentro se jugó con normalidad en el campo, pero lo que no pudo evitar el dirigente fueron las demostraciones con pancartas de las decenas de miles de aficionados presentes en el Camp Nou, como así tampoco el recrudecimiento de las protestas alrededor del estadio una vez que finalizó el derby entre Barcelona 0- Real Madrid 0.

Pasaron 53 días desde la suspensión de octubre por las protestas y el clásico español tuvo un resultado que no se daba desde noviembre de 2002. Con esta igualdad ambos siguen en lo más alto del campeonato con 36 puntos, aunque el equipo catalán tiene mejor diferencia de gol.
Los mejores y más poderosos equipos de España protagonizaron un partidazo ante más de 93 mil espectadores pero no tuvieron eficacia para romper el cero.

Messi, máximo goleador de la historia del clásico, fue titular pero no pudo marcar y ya lleva cuatro partidos sin anotar ante el Merengue. No obstante, el rosarino alcanzó una nueva marca al igualar a Xavi Hernández con 42 derbys jugados con Barcelona y quedó a uno de , Sergio Ramos, quien con 43 quedó como el jugador con más presencias de la historia.
El ganador del último Balón de Oro tuvo una contrariada actuación pero tuvo algunas apariciones importantes que pudieron haber cambiado el rumbo del partido. En el primer tiempo, a los 30’, tuvo un remate adentro del área que fue rechazado en la línea por Sergio Ramos.

Luego, a los 40, el capitán culé metió un gran pase por arriba de la defensa para habilitar a Jordi Alba, quien falló de manera increíble el mano a mano con el arquero belga Thibaut Courtois.
En el ST, a los 15’ el crack argentino tuvo otra oportunidad tras un pase desde la izquierda pero cuando estaba listo para sacar el zurdazo la pelota se le escapó por debajo de la suela.
Real Madrid no se quedó atrás con las ocasiones de peligro y también estuvo muy cerca de abrir el marcador a través de un cabezazo de Casemiro que sacó en la línea Gerard Piqué. El VAR también tuvo incidencia ya que a los 27 ‘ del ST apareció para chequear la posición del francés Mendy en el gol anulado a Bale.

Decretado el final, mientras los jugadores se saludaban en el campo, los altavoces advertían al público que se mantuviera en sus lugares. Afuera, los manifestantes independentistas se enfrentaban a la policía levantando barricadas con contenedores incendiados y tirando objetos a los agentes.
Era la postal de un final predecible donde el fútbol no pudo escapar del fuerte condimento político que jaquea a Cataluña.

Un partido aparte, en las gradas y en la calle

En la previa al derby jugado en el Camp Nou, hubo miles de pancartas azules con el lema “Spain, sit and talk (España, siéntate y dialoga)”, repartidas por la plataforma independentista catalana Tsunami Democràtic, que tiñeron las gradas del estadio del Barcelona. Junto a esas pancartas individuales hubo una segunda con la leyenda “Freedom (libertad)”, en alusión a los nueve dirigentes independentistas condenados a prisión en octubre pasado por un intento de secesión en 2017.
Una vez que terminó el clásico, los aficionados no pudieron abandonar por un buen tiempo el estadio por los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes.