Así espera el neuquino Herrera su primer superclásico
Ya se sumergió en su ámbito familiar para abstraerse del entorno y la polémica de su designación. El presidente de Boca, Daniel Angelici, cuenta cómo fue designado.
BOCA-RIVER
El árbitro Darío Herrera terminó de hacer el informe del partido Belgrano-Arsenal en Córdoba y se sumergió en su ámbito familiar para abstraerse del entorno y la polémica de su designación.
Sobre su figura y actuación, el titular del SADRA, Guillermo Marconi, consideró que el afiliado a su sindicato (Herrera) dirigirá “el partido más difícil de los últimos diez años”.
Es que si el Boca-River es de por si el partido más importante en el fútbol argentino, tiene un valor singular por tener carácter de eliminatorio en el máximo torneo continental, y el antecedente último data de once años atrás, cuando el xeneize dejó sin Copa al millonario en 2004.
Marconi resaltó las condiciones de Herrera y aseguró por TyCSports que “no es un saca partidos”.
Por su parte, el presidente de Boca, Daniel Angelici, blanqueó había un acuerdo con River y AFA que Herrera iba a ser el referí para el tercer partido desde el momento en no salió sorteado para el primer partido de la saga.
En cambio el director de Arbitraje de AFA, Miguel Scime, aseguró que fue la CONMEBOL la que resolvió.
“Es increíble que se esté hablando del árbitro y no del juego. Antes del superclásico del torneo, hubo un acuerdo con la AFA de que estaban en el sorteo Patricio Loustau y Darío Herrera. El que salía dirigía el clásico local y el otro iba a la vuelta de la Copa Libertadores. Después, sólo faltaba definir el árbitro del primer clásico de la Copa, el de la cancha de River”, sostuvo Angelici.
Tras admitir el acuerdo Angelici aclaró: “nunca puse un árbitro”.
Scime sostuvo que la designación del neuquino Herrera “es una decisión de la CONMEBOL, que tiene un colegio de Árbitro se instructores analizaron que Darío estaba en condiciones óptimas de dirigir este encuentro”.
Herrera, nacido en Andacollo, Neuquén, hace 30 años, reside en Lincoln, donde abrazó el referato.
Herrera dirigirá su primer superclásico pero tendrá la enorme carga que significa su condición de partido eliminatorio por el máximo torneo continental de clubes, es decir que no hay otro campeonato más importante a nivel internacional en que Boca y River puedan enfrentarse.
Por eso es que el abogado y ex referí Guillermo Marconi, titular del SADRA, sindicato al que Herrera está afiliado, sintetizó como el “partido más difícil de los últimos diez años”.
Boca eliminó a River de la Libertadores en 2004, hace poco más de una década.
Tiempo atrás Herrera contó que se fue a Lincoln, provincia de Buenos Aires, y “como a mi familia nunca le sobró nada, empecé a dirigir para tener un mango extra”.
“Mi caballito de batalla es la tranquilidad. Me apoyo en mis seres queridos, como mi señora Leticia Olivera, que fue clave para todo esto.
DyN
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