Aseguran que Gaido busca privatizar la Isla 132 y construir edificios de departamentos
Concejales del Frente de Todos rechazan un proyecto del MPN. Indicaron que los edificios de viviendas allí son irregulares.
Ana Servidio y Marcelo Zúñiga pusieron un manto de sospecha sobre el interés de habilitar residencias permanentes en la Isla 132 (Yamil Regules)
El Frente de Todos en el Concejo Deliberante denunció ayer que el MPN y Juntos por el Cambio buscarán cambiar a uso residencial los permisos urbanísticos en la isla 132, de Neuquén, para favorecer a desarrolladores, contratistas y “un grupo reducido de funcionarios provinciales y municipales “ de diversa extracción política.
Se trata del islote frente al río Limay en la costanera de Neuquén capital, donde se edifica el centro de convenciones (Cisne), se desarrolla la Fiesta de la Confluencia y existe al menos 2 edificios para oficinas, además del desarrollo comercial estacional.
“Los departamentos están autorizados para hotelería, si se ha permitido el uso permanente, es irregular y se debe a la falta de controles tanto del Estado como la corporación Cordineu”, sostuvo el concejal Marcelo Zúñiga.
Destacó que el proyecto que ingresó la corporación administradora del desarrollo de la costanera en la isla, es “calcado” al que buscó instalar el PRO , sin lograrlo, durante el gobierno anterior.
Zuñiga alertó de la degradación ambiental que causaría cientos de departamentos en el islote del Limay, que carece de un red cloacal.
“Queremos que se transparenten las intenciones, y se revierta esta política de generar las condiciones para que los desarrolladores urbanos y contratistas maximicen sus ganancias” a costa de sectores que carecen de servicios básicos y de posibilidad de acceso al terreno propio, dijo la concejal Ana Servidio.
No se identificó a los funcionarios que se beneficiarán con la instalación de edificios de departamento en la isla 132, pero describieron que son “de distintos partidos políticos, que se han dedicado a gestionar los destinos de la ciudad”.
Insistieron en que no son más de 3 ó 4 sociedades comerciales las desarrolladoras y contratistas que se beneficiarán con las modificaciones en el proyecto que ingresó al Deliberante.
Se preguntaron cuál será la sanidad del río Limay a partir del asentamiento poblacional proyectado por el MPN y Juntos por el Cambio.“Buscamos poner límites a este favoritismo hacia contratistas y desarrolladores”, sostuvo Servidio.
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