Cuadernos de la corrupción: todo apuntaría a Néstor Kirchner

El Toyota Corolla que conducía Oscar Centeno llevaba a Roberto Baratta, su secretario o sus asesores, desde el Ministerio de Planificación o su departamento en Barrio Norte hacia distintos puntos en la Ciudad para recoger la “recaudación”. La rutina era similar: bolsos que bajaban del auto, vacíos, y regresaban llenos. Así comienza su relato la periodista Mariel Fitz Patrick sobre los cuadernos de la corrupción del chofer Oscar Centeno, en una imponente nota publicada en Infobae.

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Asegura que todo ese dinero, tras un largo viaje, llegaba finalmente a manos del expresidente Néstor Kirchner.

En esta misma línea se expresó ayer el titular del Instituto Nacional de Capacitación Política (INCAP), Luis Juez, aseguró que el fallecido Néstor Kirchner era “el jefe de la banda” presuntamente dedicada a recaudar coimas de la obra pública. “Se lo dijimos al mismísimo Kirchner, con el que tenía una excelentísima relación ya que acompañábamos al Gobierno porque creíamos que había que construir una Argentina plural. Yo le decía ‘sacate a estos tipos de encima, Néstor, son bandidos, son sinvergüenzas, te van a dejar pegado’. Pero el jefe de la banda era él y eso es ahora evidente”, sentenció el cordobés.

En declaraciones a La Once Diez, el exembajador argentino en Ecuador le pidió a los exintendentes y exgobernadores de aquellos años que “vayan a contarle a (el juez federal Claudio) Bonadío cómo funcionaba la obra pública en sus ciudades y sus provincias”.

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“Yo no soy el único intendente que estuvo en el país entre 2003 y 2007. Yo le pido a mis colegas radicales, peronistas, socialistas, comunistas, del partido que sean: anímense y vayan a contarle a Bonadío cómo funcionaba la obra pública en sus ciudades, en sus provincias. Que algún gobernador cuente. Los tipos te digitaban la empresa y el sobreprecio”, denunció.

El informe de Mariel Fitz Patrick destaca que el destino final de esos bolsos repletos de dólares y pesos era el domicilio del matrimonio Kirchner en Recoleta. Ahí, quien recibía los bolsos con fajos de billetes era Daniel Muñoz, el histórico secretario privado de Néstor y Cristina Kirchner. Algunas veces, Baratta subía al quinto piso de ese edificio con doble entrada, por Uruguay 1306 y por Juncal 1411. Otras, era Muñoz el que bajaba, o llegaba a la entrada del edificio en un Focus o un Honda último modelo. La operatoria se repitió cientos de veces de forma similar, hasta la muerte de Néstor Kirchner el 27 de octubre de 2010.

Las investigaciones de Bonadío ahora se centrarán en la presunta participación del matrimonio Kirchner dentro de este enorme enjambre de corrupción.