Cristina Kirchner negó que fue su hija la que hizo cambiar su opinión del aborto
Mencionó legislaciones que se dieron cuando era senadora o durante sus mandatos como presidenta.
El discurso de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner fue tal vez, uno de los más esperados, tanto por sus detractores como por sus seguidores. Se manifestó a favor del proyecto que prevé la interrupción voluntario del embarazo y aseguró que “fueron las miles de chicas que se volcaron a la calle quienes me hicieron cambiar de opinión”
Si bien la senadora siempre se había expresado en contra y durante sus mandatos impidió que un proyecto de ley que abordara este tema llegara al Congreso, anoche explicó el porqué de su cambio de postura.
“Vamos a acompañar esta media sanción”, empezó a hablar Cristina y se solidarizó con “todos los legisladores y legisladoras que han sufrido agravios, insultos, descalificaciones y, tal vez, por ejemplo, como en el caso de la vicepresidenta de nuestro bloque, Nancy González, en la ciudad de Puerto Madryn cuando el frente de su negocio fue pintado tratándola de asesina”, ejemplificó.
“Siempre he votado por la vida y he gobernado por y para la vida”, aseguró y listó: sobre la nulidad de las leyes de obediencia debida y punto final, leyes de educación sexual, ligadura de trompas y vasectomía, matrimonio igualitario e identidad de género, y terminó mencionando a la incorporación de la figura del femicidio al Código Penal.
En uno de los puntos más altos de sus palabras, la expresidenta dijo que no fue su hija quien la hizo cambiar de opinión frente al aborto. “Algunos dicen que fue mi hija, una militante feminista, la que me hizo cambiar de opinión”, comenzó su explicación, pero luego aseveró que no. “No, no fue mi hija”, alegó y agregó que si le “abrió la cabeza en cuanto a abordar la cuestión feminista desde un lugar diferente al que uno lo había visto”, pero que “fueron las miles de chicas que se volcaron a la calle quienes me hicieron cambiar de opinión”.
“Si quieren saber quiénes me hicieron cambiar de opinión fueron las miles y miles de chicas que se volcaron a la calle. Verlas abordar la cuestión feminista, verlas criticar, pero también describir la realidad de una sociedad patriarcal nos debe colocar a todos en un lugar distinto”.
“Tuve la suerte de casarme y de ser compañera de un hombre que nunca me consideró su mujer sino su par, pero tenemos que entender también que esta no es la realidad de muchísimas mujeres”, reconoció.
“Creo que más que una cuestión de género esto es una cuestión generacional”, argumentó y citó a “los pibes”, que “una vez más, advierten el cambio de época y demandan ser escuchados”.
“El aborto sucede, estemos o no estemos de acuerdo, y debemos dar una respuesta como legisladores”, dijo y sostuvo que “hoy no estamos dando ninguna respuesta, estamos bajando una cortina, rechazando. Tenemos que proponer una alternativa”, deslizó.
“Así como en Estados Unidos Martin Luther King hizo que no se mencionara lo negro porque eso significaba una estigmatización”, la legisladora propuso no utilizar más la palabra aborto para anteponer la interrupción voluntaria del embarazo.
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