Animales sueltos son un drama en las rutas de la región

NEUQUÉN y ROCA (AN y Redacción Central).- En el km 57 de la ruta 237, los metales retorcidos de un Fiat Uno sobre un zanjón daban cuenta de la violencia del impacto del vehículo contra un caballo. El accidente, ocurrido el 25 de abril pasado, es una muestra más de una de las mayores amenazas para la integridad de los automovilistas que transitan por las rutas y caminos: la presencia de animales sueltos y sin control alguno.

En Rincón de los Sauces, sólo por dar una cifra, se registraron en lo que va del año 20 accidentes con animales sueltos, algunos con resultados fatales.

Se trata de un problema que torna mortales muchos tramos de las rutas nacionales y provinciales. En Neuquén, hubo en abril 37 denuncias de conductores por la presencia de animales sueltos, que colocaron como más riesgosas las rutas provinciales 7 y 51, y la nacional 22 –en el tramo que va desde Arroyito hasta Zapala-, según informó el director de Tránsito de la provincia, Natalio Rivera. “De 9 hechos denunciados hay dos accidentes”, explicó.

En Río Negro las rutas más complicadas por la presencia de animales son la provincial 6, la 237 camino a Bariloche y la 23 en toda la Región Sur de la provincia. (Ver aparte)

Este problema lo viven sobre todo los automovilistas que transitan a diario por motivos laborales. Tal es el caso de Ángel, un neuquino que viaja todos los días a Rincón de los Sauces y Añelo. “Hace quince años que llevo pasajeros y el peligro fue siempre igual. Nunca vi ningún operativo”, comentó.

Ángel identificó como zonas críticas el tramo de la ruta 7 desde Añelo a Tratayen, y también el trecho que va desde el paraje Punta Carranza hasta Rincón de los Sauces, donde habitualmente puede haber caballos, vacas, guanacos y chivos.

En paralelo, Rivera ratificó la peligrosidad de la zona de Tratayen y el tramo de la ruta 5 que va hasta Rincón de los Sauces. Y sumó entre las zonas peligrosas al paraje Cerro Bandera, sobre la ruta 22, paso obligado para los conductores que van desde Zapala hacia Cutral Co.

Sobre la 22 se refirió también el jefe de Distrito 12 de Vialidad Nacional, Néstor Bucciarelli. Dijo que el tramo peligroso es el que va desde Arroyito hasta Zapala.

La ruta nacional 40 también tiene serios riesgos. Según un conductor que transita a diario, “el tramo que une Zapala con Las Lajas es una zona brava por la presencia de yeguarizos, chivos y vacunos”. También identificó como peligroso el tramo hacia Chos Malal y Pampa del Salado, donde se produjeron 13 accidentes en el año.

Pero más allá de los puntos identificados en la ruta 7, 5, 22 y 40, el problema se extiende a toda la provincia.

En la mayoría de los casos, los campos paralelos a las rutas que están sin alambrar son tierras fiscales que pertenecen al patrimonio provincial, y una superficie menor es de propietarios particulares que, en muchos casos, no cuentan con recursos para alambrar o colocar guardaganado.

Los controles

Según la ley 2.448, la provincia debe controlar a los animales sueltos y a través de sus tribunales de Faltas o juzgados de Paz deben multar a los propietarios. Pero esto casi no se cumple. En ese contexto, en 2010 la justicia neuquina obligó a la provincia a poner en marcha un plan para avanzar en el cerramiento perimetral de campos privados y tierras fiscales (ver aparte).

Así, en febrero de este año, el Secretario de Estado de Seguridad, Guillermo Pellini, anunció que en conjunto con la Dirección de Tierras se identificó a los ocupantes de tierras fiscales y los propietarios que no han alambrado sus campos que lindan con las rutas 7, 8 y 51 para que en 180 días instalen o reparen alambrados. Dijo que el operativo comenzó con la ruta 7.

El escenario es cuanto menos complejo, con responsabilidades en muchos casos no asumidas, pero con un problema que está a la vista de todos. Unos dicen que son los dueños de los campos los responsables, otros aseguran que es el Estado, y en el medio están las tierras fiscales. Lo cierto es que los accidentes son una muestra diaria de que los animales están en las rutas.