Análisis: La indefinición de gabinete tecnócrata y político en Neuquén
Gutiérrez difícilmente acepte que alguien a quien él nominó, tenga manejo político sin su aval.
González reemplazará uno de los roles que tenía Storioni en Educación. (Archivo Florencia Salto).-
¿Político o tecnócrata? Esa fue la cuestión para el gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, cuando accedió al cargo. Tuvo una primera etapa de experimentación y durante su primer mandato produjo al menos dos cambios y, luego, retoques entre sus colaboradores.
En principio, pareció encontrar un blend con la designación del superministro Juan Pablo Prezzoli que tenía a su cargo la aplicación de políticas clave y llevaba las riendas del gabinete. Luego de recortó poder y finalmente lo eyectó.
Por la observancia de su comportamiento público, Gutiérrez difícilmente acepte que alguien a quien él nominó, tenga manejo político sin su aval.
Pasó así, una etapa de ministros tecnócratas con casi nula exposición pública en cuestiones de su incumbencia. La muestra fue el manejo de la pandemia y la forma de “manejar” conflictos con el que ocurrió con los mineros de Andacollo y el de los autoconvocados de Salud.
Cristina Storioni tiene en su haber un conocimiento acabado de la estructura megacefálica de la administración educativa, codirigida por el gremio, y se le reconoce sapiencia para negociaciones difíciles. Su par de Turismo Mariza Focarazzo renovó una estructura que orillaba la superficialidad por el purismo técnico. Son dos outsider que de la política fueron a un gabinete tecnócrata.
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