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La escarapela “azul-celeste”

El 18 de mayo es el “Día de la Escarapela”, establecido en el año 1935, pero su uso viene de larga data, según consta en los anales del Archivo General de la Nación.
Los antecedentes dan cuenta que su primera aparición fue en 1810, en la Semana de Mayo, aunque no existe documento oficial que lo pueda corroborar. Si bien Cornelio Saavedra, primer presidente de la Junta Provisional Gubernativa en una de sus memorias escribía “…se adornaban ya con la divisa en el sombrero de una cinta azul y una blanca…”, a la vez también existe documentación que desvirtúan estos dichos, como lo escrito por Beruti el 21 de mayo de 1810: “se habían puesto una señal que era una cinta blanca… ”.
En el año 1812, Manuel Belgrano se dirige por Oficio al Gobierno de las Provincias del Río de la Plata y escribe: “… que V.E se sirva declarar la escarapela nacional que debemos usar para que no se equivoque con la de nuestros enemigos…”; a lo que el gobierno responde que … “se haya, reconozca y use, la escarapela nacional de las Provincias Unidas del Río de la Plata, declarándose por tal la de los colores blanco y azul celeste y quedando abolida la roja…”, por lo que se deduce que desde este momento nuestra escarapela se comenzó a usar en los colores que se conoce, o de uno similar.
Otro tema a considerar eran los colores, porque el “azul-celeste” no tenía bien definido su tonalidad. Según la RAE, el azul es “el color del cielo sin nubes. Es el quinto color del espectro solar” y en cambio el celeste es “propio del cielo. Celestial. Azul claro. Indefinido”. Esto quedó solucionado en un proyecto de Ley presentado en 2001 por los diputados Torres Molina, Pepe y Pinchetti, donde se estableció que el azul que sería utilizado sería IRAM azulceleste cerúleo, y podrá tener la forma de cinta vertical, horizontal, circular, moño y otras, adecuadas el uso personal.