Alerta por la baja de consultas por otras enfermedades

La sala de espera de los consultorios y las guardias atestadas de gente son una postal del pasado en los hospitales. En un momento en que los sistemas de salud del país enfrentan la lucha contra la pandemia del coronavirus, muchos pacientes pusieron la atención y control de sus enfermedades en pausa por temor de contagiarse al ir a un hospital y otros, padecen las demoras en las coberturas de sus tratamientos.

Unas 26 sociedades médicas de la Argentina, esta semana, manifestaron su preocupación respecto del diagnóstico y manejo de enfermedades agudas y crónicas en el contexto de la pandemia. Argumentan, con estadísticas el descenso de consultas, estudios de diagnóstico, controles, intervenciones e ingresos a guardias.

Inicialmente la consigna fue evitar asistir a clínicas y hospitales pero, habiendo transcurrido más de 4 meses, la reducción en consultas de enfermedades cardiovasculares, diabetes, cáncer, entre muchas otras, genera grandes riesgos.

En el mismo sentido se pronunció días atrás la secretaria de Políticas Públicas de Salud de Río Negro, Mercedes Iberó: En la conferencia de prensa en la que informa los casos de Covid-19, alertó a la población y dijo que los pacientes, deben realizar sus consultas. “No se modificó el funcionamiento y todos los Centros de atención primaria, están trabajando, les pido por favor que no dejemos de concurrir, porque vemos que hay muy pocos controles”, enfatizó Iberó.

Admitió que es posible que exista temor entre los usuarios, pero aclaró que “no porque vayan a un centro de salud se van a contagiar, porque los pacientes que tienen síntomas de Covid-19 tienen consultorios respiratorios dentro de los hospitales, en cambio los pacientes con enfermedades crónicas se atienden en los centros de salud”, dijo y advirtió que “un hipertenso o diabético no controlado puede ser mucho más grave que tener Covid”.

En Neuquén desde el Ministerio de Salud, relataron que la asistencia en los controles de salud disminuyó por motivo de diferentes factores como el miedo a concurrir a los efectores de salud y las disposiciones de restricción de circulación entre diferentes localidades, pero también aumentó la asistencia domiciliaria y la telesalud.

En los centros de la salud de Cipolletti señalaron la importancia de mantener los controles de embarazo para el cuidado de la salud de la madre y del bebé. La jefa de obstetricia de los Caps, Romina Bartusch, remarcó que bajó mucho el flujo de pacientes. “Por un lado muchas mujeres embarazadas no van a un control, por temor a contagiarse y, por otro, desconocían que los periféricos estaban atendiendo”, explicó y agregó que nunca se cortó con la atención.

El doctor Fernando Tortosa, jefe departamento médico de Bariloche, atendió el teléfono en un día colmado de trabajo y relató que dentro de los pacientes no Covid hay que contemplar varias cuestiones.

“Tenemos pacientes con enfermedades crónicas, embarazadas, personas que necesitan atención urgente, y hay otros que pueden esperar un tiempo. En relación a ellos, sabemos que eso, en unos meses desembocará en una demanda acumulada que genera un daño futuro, con una morbilidad que no estamos pudiendo ver”, dijo.

Explicó que hoy el sistema de salud está funcionando al 80% en todos lados y puede haber consecuencias a largo plazo. De todos modos, sostiene que se organizaron para llegar a los pacientes con consultas ambulatorias y virtual.

“Se arman turnos telefónicos, con consultas presenciales al mínimo. A los pacientes crónicos es riesgoso hacerlos venir. Se evalúa por teléfono si es necesaria la visita y si es así, se los cita atendiendo protocolos. Es difícil el desafío y en épocas de mucho brote, es complicado cumplirlo”, dijo y agregó que también se promueve, que los médicos hagan el seguimiento de sus pacientes crónicos.

Apuesta a la telemedicina

En el Hospital Castro Rendón de Neuquén, como estrategia plantearon la atención de los pacientes Covid, y no Covid que más preocupaban. “Para toda la población que es crónica y está en tratamiento se plantean estrategias de seguimiento a través de las tecnologías de la información y la comunicación”, dijo Cecilia Cruz, jefa del departamento de telesalud del hospital Castro Rendón, y asumió que se nota la baja de pacientes en general y sobre todo en las guardias.

El sistema, en Neuquén funciona de la siguiente manera: los que necesitan atención llaman por teléfono y se los deriva al profesional que hace el seguimiento. Las historias clínicas están digitalizadas, así que ingresa allí y se contacta con la persona.

“Si tiene que venir se le da un turno y se busca que llegue de la mejor manera, y si no amerita venir presencial, el médico lo atiende por teléfono. A su vez, la mayoría de las especialidades salieron activamente a buscar sus pacientes”, dijo Cruz.

Con eje en el acceso

Una veintena de sociedades médicas advirtieron en un documento conjunto acerca de los riesgos de no controlar enfermedades, que según la OMS, “ocasionan al año 5,5 millones de muertes en la región de las Américas”. Señalaron una reducción del 60% en la consulta espontánea de enfermedades agudas y crónicas. Una caída en prácticas médicas en un 80% y las cirugías generales en un 73%.

La fundación Conciencia organizó una conferencia vía Zoom con cinco mujeres líderes de organizaciones que representan a millones de pacientes en el país, con enfermedades diversas y abordaron la situación en el marco de la pandemia.

Analizaron las consecuencias que el sistema de salud (público y privado) esté demorando, negando tratamientos en algunos casos. (ver aparte).

“Queremos destacar la importancia de aplanar la otra curva, la de las consecuencias. Más allá que muchas consultas bajaron y no se pudo aplicar de todo la telemedicina, hacemos eje en el tema del acceso, de cómo muchas personas no pueden sostener, en este contexto, los tratamientos”, dijo Luciana Escati Peñaloza, de la Fundación Más Vida de Crohn & Colitis Ulcerosa.

Más allá del sistema de salud público y la tarea de los hospitales, hicieron foco en el retraso de los tratamientos, o controles de enfermedades de manera sistemática por parte de las prepagas, los seguros de salud, e incluso, las obras sociales provinciales.

“La falta de atención, o de tratamiento, a corto o mediano plazo va a tener un impacto mayor en el sistema de salud. En algún momento, con una situación extrema y con consecuencias que tal vez sean irreversibles, se van a acercar al sistema y la respuesta tendrá que ser más grande”, dijo Luciana Escati Peñaloza.

Resaltan que si bien hay que seguir atendiendo y muy fuertemente la pandemia, también debe haber un área de los Ministerios de Salud, que pueda empezar a articular sobre las otras necesidades que tiene la población.

Hay que respetar el calendario de vacunas

Una realidad afecta a Río Negro, Neuquén y el mundo: la baja en la cantidad de ciudadanos que van a vacunarse, y un índice alto de niños de 5 y 11 años que no completan el calendario.

Sobre este punto, Mercedes Iberó consideró que existe “baja vacunación de los niños” y solicitó que se ponga atención en esto y cumplan con el calendario obligatorio. Aclaró que el Ministerio de Salud de la Nación “nota en general que hay un 20% menos de personas vacunadas con respecto al año pasado”.

Después del boom de la vacunación antigripal, las personas, trataron de no ir a centros de salud, por temor. “Se le dio prioridad dentro de la pandemia y se crearon los protocolos especiales. Si no vacunamos, terminaremos con el Covid-19, y empezaremos con las enfermedades inmunoprevenibles”, explicó Marcela González, coordinadora de Inmunizaciones del Ministerio de Salud.

González explicó que generalmente en las escuelas se desarrolla un programa de salud escolar, y se llega mucho por ese medio, pero al no haber clases bajó mucho la vacunación en los niños y adolescentes, por eso se está trabajando, para que los docentes que tienen contacto virtual, hagan ese nexo.

“La gente tenía miedo y es entendible en un principio, pero hay que seguir vacunando, porque tenemos que evitar otro problema. Ninguna vacuna debe esperar. Hay que ir a los centros de salud o a los hospitales grandes, que tienen los servicios de vacunación separados de todo”, sostuvo la coordinadora de Inmunizaciones de Río Negro.

Hay que resaltar que se sigue vacunando contra la gripe, que hay vacunas y se está reforzando en bebés y embarazadas.

Aplanar la otra curva: la de las consecuencias.

Desde la Fundación Conciencia, organizaciones que nuclean a pacientes con distintas enfermedades alertaron de que el acceso a los servicios de salud está con múltiples falencias, y eso, ocasiona graves consecuencias en las personas.

Proponen soluciones, con un diálogo colaborativo entre grupos de pacientes y los gobiernos. Sostienen que no es solamente una responsabilidad de un gobierno (pasado o actual), hay responsabilidades compartidas en todo el sistema de salud: Estado, obras sociales, medicina prepaga y seguros de salud.

“Vemos lo que viven las personas que llegan a nuestras organizaciones en busca de ayuda, desesperadas, con comorbilidades irreversibles y evitables, descreídas del sistema, dispuestas a abandonarse”, relataron desde las organizaciones.

En una conferencia presentaron una decena de propuestas. “Se incumplen programas o leyes vigentes desde hace años. Lo más importante es que se gestione con idoneidad”, sostienen.

Uno de los puntos más importantes de las propuestas que realizan es que se cumplan las leyes. Otro punto fundametal, es la desburocratización del sistema, ya que todo el tiempo ponen trabas administrativas para, tal vez, ahorrarse una dosis de medicina, o cambian las prescripciones médicas.

“Entendemos que los presupuestos son finitos, pero quizás optimizando los recursos se puede dar una mejor respuesta. Pedimos a los decisores que la sociedad civil forme parte de estas discusiones, para hacer un aporte”, destacaron.