Una de las películas más queridas e icónicas de la filmografía británica,
considerada por el British Film Institute como una de las diez mejores de su historia.
Ken Loach irrumpió en el mapa cinematográfico con esta obra que está considerada
como una de las piedras angulares del cine naturalista y cuya influencia aún está muy
presente en la actualidad.
Un retrato de extraordinario detalle y empatía del día a día de un adolescente que vive en un pequeño pueblo minero de Yorkshire y cuya vida cambiará con la aparición de un halcón herido, al que decidirá cuidar hasta que pueda volver a volar.
