Acuerdo con China dará diez años más de trabajo a la PIAP

El ministro de Energía, Juan José Aranguren, firmó en Beijing un memorándum de entendimiento con China y ratificaron la voluntad de construir dos centrales nucleares. La Planta Industrial de Agua Pesada (PIAP), espera que avancen en la firma de los contratos para garantizar su supervivencia.

Según el documento, Argentina y China se comprometen a acelerar las negociaciones para la construcción de la primera de las centrales acordadas durante el gobierno de Cristina Fernández para el primer trimestre de 2017, y la segunda para el 2019.

Si bien, las cosas están encaminadas, todavía no hay nada formal que implique la construcción. Ignacio Maffei, del área de comunicación de la PIAP, que se “siguen expresando buenas intenciones pero todavía el contrato para hacer la central no está. De todos modos parece estar encaminado”.

Los contratos serán por dos centrales nucleares, una con tecnología Candu que usa agua pesada y otra con reactor PWR que implica un salto hacia el uranio enriquecido y de agua liviana, comunicaron desde Energía.

“Si los contratos se firman será una buena noticia. Son más o menos diez años de producción, que para nuestra fábrica es más que bueno, porque hay que hacer toneladas para stock”, dijo Maffei.

En esta época la planta está con tareas de mantenimiento, porque con el frío se restringe el ingreso de gas y se aprovecha para mantener las máquinas. La idea es que en septiembre vuelvan a arrancar para hacer producción para stockear, que se entrega a Nucleoeléctrica Argentina para Atucha I, II y Embalse.

En abril, trabajadores de la PIAP reclamaron sueldos impagos pero todo volvió a la normalidad. “Está todo en orden, lo que se debía se liquidó y el problema se solucionó”, concluyó Maffei.

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