A tres años del crimen de Nahuel, la violencia regresó a Villa Mascardi
Hubo una protesta pacífica en el Alto de Bariloche, pero en la zona en conflicto jóvenes encapuchados increparon a la prensa y agredieron al dueño de uno de los lotes ocupados, que resultó herido.
Uno de los reclamos de ayer por el crimen de Rafael Nahuel, se concentró en la ruta 40 a la altura del barrio 29 de Septiembre. Foto: Marcelo Martinez
El reclamo por justicia a 3 años del homicidio del joven mapuche Rafael Nahuel en Villa Mascardi mostró ayer dos caras muy diferentes.
Mientras un grupo de jóvenes mapuches y familiares del joven asesinado cortaron ayer de manera intermitente y pacífica la ruta nacional 40 a la altura del barrio 29 de Septiembre de Bariloche, otro grupo lo hizo con violencia en Villa Mascardi. Allí, miembros de la comunidad mapuche Lof Lafken Winkul Mapu cortaron por la tarde la ruta 40, a unos 35 kilómetros al sur de Bariloche como forma de protesta.
El bloqueo fue total y se formaron extensas filas de autos, camionetas y camiones de ambos lados del corte. Una bandera con el reclamo por justicia para Nahuel cruzaba el asfalto y los manifestantes encapuchados protagonizaban la protesta.
Durante el corte Río Negro intentó dialogar con los manifestantes para que expresen su reclamo, pero un grupo de jóvenes increpó al periodista y al fotógrafo de este diario y a los colegas del diario El Cordillerano. Los jóvenes lanzaron fuertes recriminaciones por la cobertura del conflicto en Villa Mascardi y obligaron de manera violenta a los trabajadores de prensa a retirarse.
Después, se informó desde el Ministerio Público Fiscal que el poblador de Villa Mascardi Diego Frutos había sido agredido por personas que participaban supuestamente del corte de ruta. El hombre fue trasladado en una ambulancia para recibir atención médica. Dijeron que la fiscal Betiana Cendón había dispuesto varias medidas para investigar cómo ocurrió el hecho, mientras esperaba el informe médico para determinar el tipo de lesiones sufridas por Frutos.
Mientras, a 30 kilómetros de Villa Mascardi, Graciela recordaba que su sobrino Rafael Nahuel era un joven que siempre andaba sonriendo. “Todo el tiempo tenía buen humor”, destacó la mujer, ubicada al costado de la ruta mientras participaba del corte intermitente que efectuaban para reclamar justicia.
Ayer se cumplieron 3 años del homicidio en la zona de Villa Mascardi y el crimen aún sigue impune.
El bloqueo fue intermitente porque cada diez minutos liberaban una mano para habilitar el paso de los automotores. Durante la protesta no hubo incidentes, excepto una mujer que circulaba en una camioneta con dos hijos pequeños que les recriminó a los manifestantes.
Graciela Nahuel relató que ella se enteró de que su sobrino había sido herido de muerte de boca de su hermano Alejandro Nahuel, padre de Rafael. “Estuvimos casi todo el día afuera del hospital zonal (de Bariloche) esperando novedades”, rememoró. Contó que a media tarde les confirmaron el deceso de Rafael, que tenía 22 años.
La investigación por el homicidio del joven mapuche aún no pudo determinar quién lo mató. Hay cinco albatros involucrados en la causa que se tramita en el Juzgado Federal de Bariloche. Todos tienen falta de mérito.
Formaban parte de la patrulla que la tarde del 25 de noviembre interceptó en la montaña a un grupo de jóvenes, entre los que estaba Rafael, que recibió un tiro por la espalda. Hay pendiente una pericia balística, que deben hacer expertos de Salta sobre las armas que portaban los albatros esa jornada. La expectativa es que esa pericia determine de qué arma salió el proyectil que mató a Rafael.
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