#NiUnaMenos: «Y ahora que estamos juntas», resonó fuerte en las calles de Cipolletti

La marcha por el cuarto #NiUnaMenos fue masiva en Cipolletti, y concentró a cerca de 3000 personas, en lo que fue una fría tarde. Numerosas organizaciones se convocaron para uno de los hitos más fuertes en la agenda nacional. «Y ahora que estamos juntas; y ahora que sí nos ven; abajo el patriarcado, se va a caer, se va a caer, y arriba el feminismo que va a vencer”, se escuchó fuerte en el centro cipoleño.

Las principales demandas implicaron varios puntos, como la adhesión a la Ley Micaela por parte de los gobiernos provincial y municipal, la reivindicación del proyecto por la aprobación del aborto legal, seguro y gratuito, la continuidad de la moratoria para jubilación de amas de casa, y sobre todo, se expresaron en contra del proyecto que busca declarar a Cipolletti como una «ciudad provida», y sostuvieron que, justamente se trata de «la capital de los feminicidios».

Ornella infante, referente a nivel nacional del movimiento LGBT, y militante del Movimiento Evita, reclamó sobre «la quita de presupuesto hacia el Consejo Nacional de Mujeres, la falta de políticas públicas en la provincia y el municipio, y la nula formación a los funcionarios de los tres poderes es lo que nos lleva a estas cifras de violencia machista y de muertes de mujeres», enfatizó.

Por otra parte, Laura Contreras, referente de la asamblea #NiUnaMenos consideró que en los casos de feminicidios «el Estado es responsable», y acusó de que desde allí no se generan «políticas públicas para abordar la violencia de género».

Arremetió también contra la «precarización laboral» y enfatizó que «Cipolletti es la capital de los feminicidios, y no una ciudad provida».

Barbara Palumbo, miembro del gremio docente Unter y secretaria de Género de la CTA, hizo foco en el reclamo sobre la moratoria previsional, y consideró que «repercute directamente en las mujeres trabajadoras y precarizadas, que realizan la tarea en el hogar totalmente invisibilizada y con doble explotación porque trabajan en su hogar, y afuera, en negro, y no obtienen reconocimiento», exclamó.

Nadia Sánchez, miembro del colectivo La Hoguera de Fernández Oro, relató que el pasado domingo realizaron una actividad en la plaza María Elena Walsh. «Estuvimos tejiendo cuadraditos, como parte de una iniciativa de Tejiendo Feminismos, de Buenos Aires, la idea en Fernández Oro es hacer un paño y enviarlo, con los nombres de las cinco víctimas de femicidios locales, con el mensaje ´no estamos todas´», contó.

Andrea Díaz, del Plenario de Trabajadoras remarcó que «no puede haber ni una menos si no hay aborto legal, seguro y gratuito», y también denunció el incumplimiento del «cupo laboral trans».