El mirador de La Lobería en estado de abandono

Durante el fin de semana, los visitantes a La Lobería no habrían podido ingresar al apostadero de lobos de la reserva faunística de Punta Bermeja donde está cerrado el Centro de Interpretación Faunística.

Las autoridades de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable prometieron que las instalaciones estarían abiertas al público, aunque sea, las pasarelas de avistamente de la colonia de lobos, las tranqueras estuvieron vedadas al público.

Visitantes dejaron trascender sus quejas por el abandono de un recurso turístico por parte de la Provincia y la municipalidad de Viedma que extendió el ejido hacia Bahía Creek.

La responsabilidad del Centro estaba a cargo de la Fundación Félix de Azara que recientemente la Provincia le dio de baja a un convenio de atención a los visitantes.

RíoNegro hizo contactos con la entidad que pertenece a la Universidad Maimónides de la Ciudad Autonóma de Buenos Aires (CABA).

En lo inmediato, Adrián Giacchino, miembro del Consejo de Administración y firmante del convenio caído, se limitó a señalar que “se dio por concluido el ‘co-manejo’ por un tema de recursos humanos, no por (falta) de recursos o rendiciones” de fondos.

Días atrás, en Ambiente se admitió que habían tenido que intimar a la entidad a rendir fondos, y volverán a hacerlo para el cierre del acta.

La primera área protegida de Río Negro

Punta Bermeja-La Lobería fue creada en 1971 con el objetivo de conservar la colonia reproductiva de lobos marinos de un pelo más grande de la Patagonia Norte y es la primera área protegida de la provincia. La reserva se encuentra a 54 kilómetros de esta capital.

Durante todo el año cientos de turistas llegan a la zona para poder visualizar desde las pasarelas a esta colonia que llega a tener una población de 5000 ejemplares.

Desde el mirador, ubicado sobre los acantilados, es posible apreciar el comportamiento de los lobos marinos y de las aves costeras, tales como la paloma antártica, cormoranes, gaviotas cangrejeras, gaviotas cocineras, gaviotas capucho café, petreles, biguás, gaviotines y loros barranqueros, al igual que de aves continentales como el Halconcito Colorado, Halcón Peregrino, Chimangos.

En ocasiones se registra la presencia de elefantes marinos y de orcas que se acercan en busca de un lugar seguro para alimentarse. También es frecuente ver pasar, cerca de la costa, ejemplares adultos de ballena franca austral.