El voley de Bariloche, en un gran momento

La Liga de Voley ya puso en marcha su torneo 2018, que en las secciones masculina y femenina agrupa un total de 23 equipos y más de 200 jugadores.

Con su crecimiento en los últimos años, la liga barilochense logró fortalecer su perfil regional e incluso internacional, ya que este año participan equipos de Dina Huapi, Esquel, El Bolsón, San Martín de los Andes, Osorno y Puerto Montt.

Pero al decir de uno de los dirigentes, Exequiel Alvarado, para lograr ese atractivo y el actual nivel de competitividad también influyó “la seriedad de la organización”, que incluye un calendario ordenado, el cumplimiento estricto de los fixtures, la conformación de un comité de disciplina y hasta un colegio de árbitros, algo que no existe en otras ligas de la región.

“Hasta de Neuquén quieren venir a jugar a Bariloche”, aseguró Alvarado.

La actual edición de la liga comenzó el 8 de abril y ya lleva disputadas dos fechas, una de mujeres y otra de varones.

El esquema alterna un fin de semana cada división, de modo que cada equipo juega cada 15 días. Si no pueden hacerlo más seguido es por falta de gimnasios aptos, un mal crónico que afecta a varios deportes en Bariloche.

Los partidos se disputan todos en el gimnasio Don Bosco y hay competencia asegurada hasta noviembre.

Los equipos que se perfilan como candidatos en masculino son San Esteban, Verdulerías Líder y El Bolsón en masculino. Mientras que Patagonia Anglers y Campanario se destacan entre las mujeres.

Alvarado dijo que la edad promedio de los jugadores es de 25 años y que la trayectoria de la mayoría comenzó con un primer contacto con el voley en la escuela, la posterior integración a un club o al deporte universitario (especialmente los que viajaron por estudio a otras ciudades) “y luego vuelven y se integran a la liga de Bariloche”.

Como una señal elocuente del crecimiento del torneo local, Alvarado comentó que “hace cinco años había sólo 4 equipos de mujeres y 3 de varones, y de afuera sólo venían de El Bolsón”.

Una crisis que preocupa

Sin embargo, no todo es para festejar y existen algunas señales de alarma.

“Uno de los problemas que vemos es que el voley escolar ya no es lo mismo que antes, se juega cada vez menos y la causa es difícil de determinar. Yo creo que influye la falta de materiales”, dijo el dirigente.

Aun así el voley de Bariloche dio figuras importantes que lograron inserción en Buenos Aires, como Joaquín Rodríguez (River), Marcos Di Giovanni (Boca), formados originalmente en Don Bosco y con experiencia en el ámbito federado. En esa línea se destaba también Nicolás Bracaccini, de 17 años, quien fue convocado a la selección nacional pre menor.

En paralelo con esos logros, Alvarado también señaló que en el auge actual mucho tuvo que ver la elección de Bariloche como sede de torneos nacionales e internacionales, como el preolímpico femenino y el sudamericano sub 21 de varones, realizados ambos en 2016.

El dirigente admitió que la liga local no clasifica ni tiene vínculo con el resto del voley nacional, y que una meta sería tener equipos de Bariloche en alguna liga de ascenso, algo que hasta ahora resultó imposible “por razones organizativas y económicas”.

La liga barilochense no clasifica ni tiene vínculo con el resto del voley nacional, y una de las metas sería tener equipos de Bariloche en alguna liga de ascenso.

De alto nivel

La ciudad fue sede de tres torneos de gran repercusión:

Preolímpico femenino (enero 2016). Argentina le ganó la final a Perú 3 a 0.

Argentino sub 19. Córdoba ganó las dos finales. En varones 3 a 0 a Buenos Aires, y en mujeres 3 a 1 a Santa Fe.

Sudamericano sub 21 de varones. Argentina derrotó a Brasil 3 a 1 en la final.