La terminal de Neuquén desborda por el fin de año y las vacaciones

Las fiestas y el inicio de la quincena de vacaciones de enero marcaron otra vez el ritmo en la Estación de Ómnibus de Neuquén, que cada día recibe casi 10.000 personas en los pasillos, boleterías y andenes que llevan y traen pasajeros en busca de unos días de descanso o de un encuentro con familiares.

La alta demanda comenzó poco antes de Navidad. El 21 se acabaron casi todos los pasajes para los días posteriores, y en el caso de ayer, en la terminal sólo había asientos libres en las diferentes líneas a partir del sábado.

Los destinos más ranqueados son Temuco o Concepción (Chile), Buenos Aires, Córdoba y Mendoza; y la zona norte y cordillerana de Neuquén.

A Buenos Aires, por ejemplo, salen entre 26 y 27 coches por día; y para Navidad hubo 10 unidades de “refuerzo”. “Si hubieran más coches, saldrían, porque el pasillo estaba lleno de pasajeros”, se indicó.

“Excepto algunos que vienen de Buenos Aires y que tramitan sus boletos por mail, la mayoría de los pasajeros viene a la ventanilla a buscar su ticket. No hacen reservas, llegan a las 9 de la mañana y se enteran que tendrán pasajes pasadas las 16 o 19. La demora se debe a que no hay pasaje, los colectivos salen llenos”, se indicó desde otra de las ventanillas.

Incluso llegan viajeros desde otras zonas del país y buscan ventanilla por ventanilla, la mejor combinación posible para trasladarse hacia San Martín de los Andes, Bariloche u otros destinos de la cordillera.

En varias empresas de colectivos el panorama fue similar. Los pasajeros no se adelantan a comprar el pasaje, sino que llegan con sus mochilas y las valijas de viaje y pretenden salir en el día.

“Para Navidad hubo gente que esperó 24 y hasta 36 horas, se quejaban de que no había pasajes, no había ni combinación, estaba todo agotado”, dijo la empleada de unos de los cafés del lugar, agotada del trajín por tantos clientes.

Facundo Perea, que vive en Villa Manzano, compró su pasaje ayer a las 11 con rumbo a Salta, para pasar el primero de año con sus padres y sólo consiguió cerca de las 20. “Voy a darles una sorpresa, hace 7 años que no viajo para allá; pero mi colectivo sale dentro de unas siete horas, así es que hablé con un amigo que me haga el aguante acá en Neuquén, y vuelvo después”, explicó.

“En temporada baja tenemos
unas 5.000 personas por día en la terminal. Se duplican en las vacaciones de invierno y ahora”.

Luciano Fernández, gerente de la terminal de ómnibus de Neuquén (ETON).

El descubrimiento

y el “aeropuerto”

“Para mí es todo nuevo, vengo a conocer la Patagonia”, dijo Sofía Piedrabuena, que llegó desde Venado Tuerto (Santa Fe) en colectivo y buscaba en la terminal una combinación que la lleve hasta Arroyito, el lugar elegido para bajarse, hacer dedo con su compañero y llegar “hasta donde nos lleven”, pero con destino final Bariloche.

Andrés es de Rosario y conoció la terminal el año pasado, cuando regresaba del sur con destino Córdoba. “Yo le dije vamos a la terminal: acá no es como en Buenos Aires o Córdoba, donde todos nos mezclamos en el andén, un mundo de gente con bolsos y en medio de ambulantes. Acá esperas en el pasillo (con aire acondicionado), parece aeropuerto”, exageró.