El puerto San Carlos suma un paseo, bicisendas y veredas

La recuperación de las escolleras del puerto San Carlos, debajo del Centro Cívico de Bariloche, más otras inversiones que promete la empresa Powerlink transformarán en un paseo las ruinas que quedaron luego de años de litigios con el municipio y de abandono.

Powerlink es la empresa que explota, como inquilina, el subsuelo del puerto desde hace años como Puerto Rock, un espacio de recitales. El año pasado compró además el teatro La Baita.

“Ese sector, desde hace aproximadamente 20 años, se caracteriza por su estado de abandono general”, señaló la empresa en un comunicado.

La empresa explotarán boxes de estacionamiento medido en la zona que va desde el edificio del puerto hasta la confitería Holly, incluidos los playones.

“Desde hace años -recordó la firma-, el sector del playón frente a las discos es utilizado como pista de picadas automovilísticas por las noches o como baño público”.

Habrá un paseo costero que arrancará en la escollera y continuará hacia el oeste. Para eso, fue preciso reconstruir varias losas, además de corregir la posición de cilindros de hormigón y proteger toda la estructura con gaviones. Habrá además veredas, bicisendas, un mejoramiento integral con baños públicos.

También están en marcha una renovación del sistema de iluminación y seguridad.

Al refuerzo del “viejo hormigón” se sumará el remplazo de las actuales barandas y la colocación de 700 metros de nuevas protecciones con un diseño especialmente pensado para la seguridad, “tanto en la parte superior, como en la inferior del playón”, se informó.

La playa de estacionamiento tendrá 273 boxes y prevé un servicio de traslados desde ese lugar a la zona céntrica. Este asunto está en manos del Concejo Municipal.

La empresa tiene sólo tres años de concesión por delante. Powerlink sostuvo que a pesar de este horizonte corto, “Bariloche necesita de un sector privado que colabore con el Estado en la obra pública de la ciudad. Este es un sector de la ciudad que desde hace tiempo está abandonado y nosotros tenemos la posibilidad y el compromiso social de contribuir para mejorarlo”.

Con esta nueva obra e inversión efectuada por el concesionario, “se persigue además de modificar y embellecer un espacio abandonado desde hace años, jerarquizar la Costanera como sucede en la mayoría de los destinos turísticos y dar una solución al problema del estacionamiento que evidencia Bariloche”, se dijo desde la empresa.

Las instalaciones fueron municipalizadas durante el gobierno de María Eugenia Martini. Los inquilinos negociaron la nueva relación contractual.

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