Sol de Mayo fue una máquina todo el año

Los de Viedma se quedaron con los dos torneos que organiza la Asociación.

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VIEDMA (AV).- Sol de Mayo logró los dos títulos del año en la Asociación de Básquet del Valle Inferior. Fueron dos torneos diferentes, con dos equipos diferentes pero con las mismas ganas de alcanzar la gloria para devolverle el protagonismo al Albiceleste. El Apertura estuvo lleno de emociones y Sol de Mayo era el gran candidato desde el arranque. Entre sus filas contaba con el legendario Leonardo Sandón, la promesa Lucas Palacio y la incorporación de Facundo Brizuela, que lo convirtieron en un equipo temible. Todos ellos sumados a Sebastián Fermanelli y a un grupo de juveniles que comenzaron a armarse de experiencia. En la fase regular no hubo lugar para las dudas, logró el “1” de la fase regular, pero en semifinales tuvo que transpirar para superar a Villa Congreso que le presentó batalla. Finalmente se quedó con la serie por 2-1 y selló su pase a la final. En la definición se encontró con un aguerrido Atenas de Patagones, que con muchos juveniles ya había dejado atrás, sorpresivamente, a Jorge Newbery, La definición al título se estiró a cinco partidos y en el quinto, que se disputó en el Alfredo Gerometta, Leonardo Sandón manejó los hilos y sacó a relucir toda su experiencia para que el Albiceleste festeje después de 11 años de sequía en el Apertura. Ese final fue de muchas emociones juntas, por un lado el título y el otro el retiro de Sandón. Pero hubo más porque Lucas Palacio no dejó pasar la chance, y dio el salto para jugar en el segundo escalón nacional con Deportivo Viedma. Para el resto del año, la dirigencia junto con el técnico Claudio Boccatonda confiaron en los juveniles para afrontar el Clausura. No llegaba como el candidato pero hizo un buen papel en la fase regular, y bajó el liderazgo de Sebastián Fermanelli quedó en el segundo lugar, detrás del favorito, Deportivo Patagones. El peor momento de la temporada lo vivió en semifinales, frente a San Martín, aunque en la apareció Fermanelli para dar vuelta la historia y definir el título frente a su clásico rival. Patagones llegaba como candidato y Boccatonda sabía que sólo con Fermanelli no iba ser suficiente, por eso le dio confianza a los juveniles Agustín Sosa, Juan Pastor y Agustín Schander. Lejos de ser una mochila pesada esa definición, los pibes cumplieron un rol vital para que Sol de Mayo se quedé con el torneo Clausura y se convierta en el dueño de Valle Inferior.

Básquet

Fermanelli fue clave en la obtención del Clausura. El base fue el amo y señor del equipo.


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