Largaron el agua para riego en el Alto Valle

Dos de las cinco inmensas compuertas del dique Ingeniero Ballester ya fueron abiertas y comenzaron a expulsar el agua embalsada que irrigará las zonas productivas de la región. Basura en los canales y desagües y la falta de pago del canon de riego complican a los consorcios de la región que se encargan de mantener el sistema de irrigación.

Dique Ballester

Hoy los empleados guardadiques del Ballester empezaron a realizar las primeras maniobras de reactivación del circuito hídrico que alimenta a los canales de riego, desde Barda del Medio hasta Chichinales. Durante las primeras horas se largaron 5 metros cúbicos para ir limpiando los kilómetros iniciales del canal principal y sobre el mediodía, cuando “Río Negro” recorrió el dique. Las compuertas ya expulsaban unos 8 metros cúbicos de agua por segundo.

El nivel del embalse era bueno y el agua acumulada proveniente del río Neuquén alcanzaba los 3 metros de profundidad. “Esto le da vida al Valle y para nosotros es una satisfacción muy grande que exista esta obra”, señaló el guardadique Rubén Jorquera, quien trabaja en el Ballester desde hace 21 años. Él y cinco compañeros suyos son los “vigías” del dique, se encargan de realizar las tareas manuales que implica la regulación del agua de riego y durante las 24 horas del día están atentos para garantizar que todo esté bajo control.

“Pienso que este año la temporada de riego va a ser normal. En la cordillera hay bastante nieve pero acá en la región hemos tenido muy pocas lluvias”, señaló Eduardo Antero, presidente del consorcio de regantes de Cipolletti. Según explicó el dirigente frutícola, el sistema de riego diseñado hace más de 100 años continúa amenazado por varios factores. El avance de las urbanizaciones sobre las tierras irrigadas, la contaminación de los canales con toneladas de basura arrojada por los vecinos de las distintas localidades y la falta de compromiso de los propios productores para mantener el servicio, ponen en jaque al sistema.

Prácticamente la totalidad de los consorcios de regantes (Cipolletti, Cinco Saltos, Allen – Fernández Oro, Roca, Cervantes, Ingeniero Huergo y Villa Regina) tienen serios problemas para ejecutar obras y realizar el mantenimiento sobre canales y desagües porque la mayoría de los fruticultores no pagan en tiempo y forma el canon de riego. Actualmente el consorcio de Cipolletti emite 1650 boletas de cobro del servicio pero sólo 134 son abonadas regularmente. Un caso similar se da en Allen y Fernández Oro donde, según los registros de la temporada anterior, apenas el 25 % de los fruticultores cumplían con la obligación de pagar el canon.

Artero agregó que el sistema de riego demorará unos 15 días en “llenarse”, desde Barda del Medio a Chichinales y al mismo tiempo se mostró molesto porque la Vuelta a la Manzana demoró la habilitación de sistema. “Íbamos a largar el agua el 15 y la terminamos largando ayer porque el rally de la Vuelta a la Manzana ocupó en canal de riego en Roca. Parece ilógico que se haya priorizado un evento deportivo por sobre la producción, pero fue así. Podrían haber corrido la carrera una semana antes si es que quieren utilizar un canal que es de riego y no una circuito de rally”, agregó Artero.

Diego Andrés Von Sprecher


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