Buscan reactivar la causa por la masacre del laboratorio en Cipolletti
El viudo de una de las víctimas reiteró ante el nuevo juez de la causa el pedido de formación de un banco provincial de huellas palmares. El caso prescribe en nueve meses.
RÍO NEGRO
La causa se movió porque Ricardo Cejas, marido de Carmen Marcovecchio, se constituyó en querellante para poder acceder al expediente e impulsar una nueva investigación.
El nuevo juez Maximiliano Camarda recibió la solicitud para que se compare la huella palmar hallada en la escena del crimen con las de los internos de las cárceles de Río Negro y Neuquén.
La liberación de David Sandoval dejó impune el crimen de Mónica García (bioquímica), Carmen Marcovecchio (psicóloga) y Alejandra Carbajales (paciente).
La causa prescribe en 2014 y el único condenado fue liberado hace tres años bajo el precepto constitucional de que nadie puede ser juzgado dos veces por el mismo hecho.
Sin embargo la instrucción de la causa siguió abierta porque nunca se pudo determinar quién fue el hombre que huyó de las escena del crimen con una botella de ácido en la mano y que se cruzó en bicicleta con al menos dos testigos. (Agencia Cipolletti)
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