Un año de desafíos para salvar vidas

CIPOLLETTI (AC).- La nadadora trasplantada Patricia Woudwijh retomó la actividad después de una afección que la obligó a realizar un riguroso tratamiento en Buenos Aires. El año pasado sufrió una hepatitis tóxica y recién en noviembre pudo volver a entrenar y se preparó para cruzar el lago Nonthué en San Martín de los Andes. Participó de esa competencia el sábado pasado y obtuvo una medalla. Aprovechó el espacio para dejar su mensaje y concientizar sobre la donación de órganos. La cipoleña Patricia Woudwijh fue trasplantada del hígado hace 13 años y es una nadadora multipremiada. En 2011 viajó a los juegos mundiales que se realizaron en Suecia y obtuvo siete medallas. El 2012 fue un año de inactividad porque la mujer, que también es referente del Cucai en la región, padeció una hepatitis tóxica y tuvo que viajar a Buenos Aires para realizar un tratamiento. “Fue un año complicado y los médicos me prohibieron nadar y realizar actividades físicas. Recién en noviembre me autorizaron a entrenar”, contó ayer Patricia. El sábado participó de la competencia en el lago Nonthué en San Martín de los Andes. La acompañó la nadadora Rosaura Escudero, que también recibió un trasplante hepático en España. “Como siempre llevamos nuestro mensaje de concientización sobre la donación de órganos. Fue un desafío largo, de 3.300 metros en aguas heladas, pero cumplimos el objetivo”, repitió emocionada. En los próximos días, Patricia viajará a la costa rionegrina para asumir otro desafío: la Patagones-Viedma, un clásico de la natación de aguas abiertas de la región. El último fin de semana de febrero estará en El Chocón y en julio tiene previsto ir a las olimpíadas mundiales para personas trasplantadas en Sudáfrica. “La intención es llevar el mensaje cada vez más lejos para que la gente tome conciencia de salvar vidas”, indicó la cipoleña.

La competencia en el lago Nonthué sirvió también para concientizar sobre donación.