Recrudece la tensión entre Colombia y Venezuela

AP

CARACAS.- Venezuela protestó ayer contra el gobierno colombiano y llamó a consultas a su embajador en Bogotá en medio de nuevas tensiones con la saliente administración de Álvaro Uribe, a quien el presidente Hugo Chávez acusa de impedir un acercamiento entre ambos países. Las medidas fueron anunciadas en rueda de prensa por el canciller venezolano Nicolás Maduro un día después de que el gobierno de Colombia afirmara “tener evidencias” sobre la presencia de al menos cuatro jefes de la guerrilla FARC y uno del ELN dentro de las fronteras de su vecina Venezuela. “Hemos llamado a nuestro embajador Gustavo Márquez en Bogotá para que venga a Caracas a consultas”, declaró el canciller venezolano. El gobierno de Chávez “irá tomando en las próximas horas: medidas de carácter político, diplomático”, añadió Maduro. El presidente Chávez declaró por su parte que las acusaciones colombianas representan “el desespero” de la “extrema derecha colombiana” para evitar un acercamiento entre Venezuela y el presidente electo de Colombia Juan Manuel Santos. “Esto que está sucediendo no es sino el desespero del grupo de la extrema derecha que rodea a Uribe para tratar de generar un gran conflicto e impedirle a Santos que vuelva a establecer relaciones respetuosas con su hermana Venezuela”, afirmó Chávez. Cabe recordar que Santos, que asumirá el próximo 7 de agosto e invitó a Chávez a su toma de posesión. El jueves, el gobierno colombiano aseguró que hay evidencias que “acreditan la presencia en Venezuela de algunos cabecillas” tanto de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) como del Ejército de Liberación Nacional (ELN). Entre ellos se mencionó a “Iván Márquez; Rodrigo Granda, alias Ricardo; Timoleón Jiménez, alias Timochenko; y Germán Briceño, alias Grannobles (de las FARC); así como de Carlos Marín Guarín, alias Pablito (del ELN)”. El gobierno de Uribe anunció ayer que tiene en mente acudir a instancias internacionales para denunciar que autoridades venezolanas les dan cabida en ese país a algunos jefes de las guerrillas de las FARC y el ELN. En un comunicado Bogotá aseguró que “durante seis años el gobierno colombiano sostuvo un diálogo paciente con el gobierno de Venezuela, al cual, en varias ocasiones, dio informaciones sobre localización de terroristas en ese territorio’’. Pese a ese diálogo, agregó, “todo fue infructuoso en relación con cabecillas terroristas’’. En consecuencia, concluyó, “debemos pensar nuevamente en acudir a las instancias internacionales’’. (AFP/AP)

Uribe, en el tramo final de su gestión, vuelve a chocar con dureza con el gobierno venezolano.