Llamado de atención de Greenpeace a Weretilneck por los proyectos de Catedral y del Piltriquitrón
Advierten por el proyecto de urbanización en el cerro Catedral en Bariloche y por la iniciativa de aerosillas en el cerro Piltriquitrón en El Bolsón. Los motivos.
El proyecto de urbanización del cerro Catedral es aprobado por el intendente Walter Cortés. Foto: archivo
Greenpeace Argentina alertó al gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, sobre los proyectos de urbanización en el cerro Catedral, en Bariloche, y el de aerosillas del cerro Piltriquitrón, en El Bolsón, debido a «la deforestación y violación a la normativa vigente que podrían significar». La carta está firmada por Hernán Giardini, coordinador de la Campaña de Bosques de la fundación.
La misiva hace referencia a dos proyectos que se debaten en jurisdicciones municipales porque refiere a concesiones que son propias de las potestades de las ciudades y no de la provincia.
Según menciona la nota, el proyecto urbanístico en el cerro Catedral, presentado por la empresa Catedral Alta Patagonia (Capsa), implicará «la construcción de barrios residenciales, hoteles, calles y estacionamientos sobre 79 hectáreas en la montaña concesionada para actividades invernales». Advierte que se trata de sectores que el Servicio Geológico Minero Argentino (Segemar) calificó «de peligrosidad natural alta y no apto para urbanizaciones» y que además, «es fuertemente rechazado por organizaciones sociales y vecinos de Bariloche».
Respecto al proyecto de instalación de aerosillas en el cerro Piltriquitrón, presentado por la empresa Aerocumbres, aseguró que implicará la construcción de 11 torres e infraestructura en un área de casi un kilómetro de largo sobre la montaña. También mencionó que «es fuertemente rechazado por la comunidad de El Bolsón».
Giardini advirtió que ambos proyectos impactarán sobre un área definida como Reserva de Biósfera Andino Norpatagónica de la Unesco e implicarán desmontes en zonas clasificadas en las categorías I (rojo) y II (amarillo), según el Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos de Río Negro, «lo que viola la Ley Nacional de Bosques 26.331».
«En suma -agregó-, rechazamos ambos proyectos por el impacto que generarán sobre los bosques nativos y por ser claramente violatorios de la normativa forestal nacional».
Recordó que el Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos de Río Negro está vencido desde hace varios años en tanto el decreto reglamentario de la Ley Nacional de Bosques establece que estas normativas deben actualizarse cada 5 años en forma participativa. También prevé que deben ser progresivos a fin de aumentar la protección de las zonas forestales de la provincia.
«La grave crisis climática y de biodiversidad nos obliga a actuar en consecuencia. Más deforestación representa más cambio climático, la desaparición de especies, inundaciones, más desertificación, más enfermedades, más desalojos de campesinos e indígenas, y más pérdida de alimentos, maderas y medicinas«, indicó.
Por último, Giardini advirtió que Argentina firmó un compromiso de Deforestación Cero para 2030 en la Cumbre Climática de Glasgow COP26 en 2021. Y pidió la actualización del Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos de Río Negro para «ponerle fin a los desmontes, promover un manejo sustentable y la restauración de los bosques nativos».
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