Escondido cerca de la frontera con Chile: el cajón del río turquesa que es un paraíso de la pesca con mosca

Es el destino perfecto para quienes disfrutan de la pesca y la naturaleza y la historia. Tiene impresionantes paisajes y cascadas ideales para relajar.

Ubicado en el corazón de la Patagonia argentina, en la provincia de Chubut, el Cajón Grande del río Pico es uno de esos destinos ocultos que parecen sacados de un cuento. Es un rincón apartado entre montañas, lagos y arroyos, que exige algo más que una simple visita: un espíritu aventurero y un deseo profundo de conectar con la naturaleza más pura. Este paraíso escondido, cerca de la frontera con Chile, es muy apreciado por los pescadores con mosca y los viajeros que buscan un respiro lejos del bullicio de los destinos turísticos más conocidos.

Cómo acceder al Cajón del río Pico


El pueblo más cercano al Cajón Grande es la Comuna Rural Atilio Viglione, antes conocida como Aldea Las Pamas. Situado casi en la frontera con Chile, este pequeño asentamiento ofrece construcciones tradicionales de madera y guías baqueanos que acompañan a los visitantes en el recorrido hacia el Cajón. El camino no es sencillo, y la ruta solo está parcialmente asfaltada, por lo que se recomienda el uso de vehículos 4×4 para aventurarse más allá del pueblo.

Cascada Opazo. Foto Soledad Martínez, Comarca Una, Río Pico.

El trayecto comienza por una ruta que se adentra en el paisaje patagónico, pasando por tranqueras que deben ser abiertas y cerradas por los viajeros, un pequeño ritual de respeto a las tierras privadas que dan paso a esta vasta zona natural. Después de atravesar ocho tranqueras de madera, se llega a un puesto de la familia Solís, donde el camino se va estrechando y finalmente se debe continuar a pie.

Después de la 4 x 4, empieza la caminata al Cajón Grande del río Pico


La primera parte del recorrido, accesible en vehículo 4×4, permite admirar el paisaje de valles cubiertos por pastos verdes donde pastan caballos y ovejas. Sin embargo, pronto el terreno se vuelve más agreste, y es aquí cuando comienza la verdadera caminata. Con la ayuda de un baqueano local, los viajeros atraviesan bosques de ñires y lengas, rodeados de cañaverales y con el río Pico fluyendo a lo lejos.

A medida que se asciende por la montaña, el paisaje se va transformando, y finalmente se llega al Cajón Grande del Río Pico, un majestuoso cañón de paredes que alcanzan los 30 metros de altura. Este lugar, que nace en la Cordillera de los Andes, es el hogar de truchas en abundancia, lo que lo convierte en un verdadero paraíso para los pescadores con mosca. Aquí, los visitantes no solo disfrutan de la pesca, sino también de un paisaje que corta la respiración, donde el río zigzaguea hacia el océano Pacífico.

Lago Vintter Foto: Raquel Opazo, Comarca Una Río Pico.

Otros atractivos cerca del Cajón del río Pico


El Cajón del Río Pico no es el único atractivo de la zona. En los alrededores se encuentran varios lagos de increíble belleza, muchos de ellos de acceso restringido. En total, la cuenca del río alberga una veintena de lagos, pero la mayoría permanece oculto a simple vista. Para descubrirlos, es necesario contar con guías locales, que conocen a la perfección los senderos y las tranqueras que dan acceso a estos paraísos ocultos.

Los lagos más cercanos a Río Pico son sencillamente numerados, del 1 al 5, y están diseminados por la cordillera. El Lago 1 está a unos 12 km, mientras que el Lago 2 se encuentra a 40 km y solo se puede acceder a caballo o en vehículos 4×4. El Lago 3, el más popular y conocido, es ideal para nadar en verano gracias a su poca profundidad y tiene instalaciones para acampar y cabañas. El Lago 4 está en pleno corazón de la cordillera, y solo se puede acceder a través de las propiedades privadas de las familias Gago o Iribarne. Por último, el Lago 5 es un destino frecuente entre los pescadores de truchas, ya que se encuentra en la misma ruta que lleva al Cajón Grande.

Recomendaciones para visitar el Cajón del río Pico


Llegar al Cajón Grande del Río Pico no es tarea fácil, pero la recompensa es un paisaje natural sin igual. Desde Río Pico, se sigue la Ruta Provincial 19 durante 38 km hasta llegar a la Comuna Rural Atilio Viglione. Desde allí, solo los vehículos 4×4 pueden seguir el trayecto, cruzando el río Las Pampas antes de continuar a pie, siempre bajo la guía de un experto baqueano.

La mejor época para disfrutar de este rincón patagónico es entre octubre y abril, ya que durante los meses de invierno las nevadas dificultan el acceso. Además, durante el deshielo primaveral, el caudal del río Las Pampas puede aumentar considerablemente, lo que hace que el vadeo sea más desafiante.

Si buscas una aventura en plena naturaleza, el Cajón Grande del Río Pico es un destino ideal para desconectar y sumergirte en uno de los paisajes más impresionantes y ocultos de la Patagonia argentina.


Certificado según norma CWA 17493
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales
<span>Certificado según norma CWA 17493 <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios