El campo de tulipanes de Trevelin ya está abierto: cómo recorrerlo y cuánto sale ver su belleza infinita
La experiencia estará disponible durante un mes, así que aprovechá. Hasta el 7 de noviembre podrás vivir momentos únicos
Un plan para disfrutar a pleno, en Chubut
¿Alguna vez soñaste con caminar entre miles de flores, como zambulléndote en un mar de colores, mientras te invade el perfume de la naturaleza y el cielo te abraza, con montañas gigantes como testigos?
Si vivir esa experiencia está entre tus deseos no busques más. En Trevelin, un pueblo mágico de Chubut, un campo sembrado de miles de tulipanes te ofrece esa posibilidad. El lugar lo tiene todo, y la actividad es soñada: podrás entrar al campo que explota de color, recorrerlo, perderte en el aroma que aportan plantaciones anexas como las de narcisos, sacarte las fotos que quieras y compartir algo rico en familia, pareja o amigos.
La buena noticia es que la temporada para vivir ese momento único ya arrancó, pero habrá que apurarse. Porque la atracción durará sólo un mes, hasta principios de noviembre.
«Estamos ubicados sobre la Ruta 259, a 13 kilómetros desde el centro de Trevelin» contó Juan Carlos, que es uno de los artífices de esta encantadora propuesta.
Él es nieto de galeses, y, desde chico, esos tulipanes elegantes y de colores vivos lo cautivaron. Los veía como las flores más hermosas, y al completar sus estudios no lo dudó. Arrancó plantando los primeros bulbos a los 23 años, con la intención de venderlos al exterior. Pero esa dinámica no funcionó como esperaba y se volcó al mercado interno.
«Al hacer este cambio tuvimos que ampliar el catálogo de colores. Llegamos a 30 variedades y resultó ser una paleta increíble. Por eso hace ocho años decidimos abrir nuestras puertas, para que la gente pudiera gozar de esta experiencia de ‘zambullirse’ en la naturaleza» alentó, con entusiasmo.
Hoy su familia entera está dedicada a la actividad. Su hijo Matías supervisa los cultivos, su ex esposa sigue colaborando a la distancia (tiene en Córdoba otro proyecto turístico) y él llegó a sus 52 años rodeado del colorido que siempre lo enamoró.
«Pasan cosas muy lindas. El otro día llegó una adolescente súper emocionada, junto a sus papás. Eligió viajar para ver los tulipanes como regalo por sus 15 años y quedó conmovida. Le permitimos hacer un recorrido especial, para que pudiera estar más cerca de las flores, y se fue maravillada» compartió el hombre.
¿Cómo es el recorrido?
Pero… ¿cómo es el recorrido por ese campo de cuento? Muy simple. Dentro del cultivo y en sus laterales hay pasarelas que permiten caminar en medio de tanta belleza. Allí cada uno puede entregarse a disfrutar a su manera. Relajarse ante tanta magia, tomarse fotos, e incluso llevar su mate y reposera y quedarse a lo largo del día compartiendo, en grupo o en soledad, de esas postales increíbles.
«La entrada, ahora, está $20.000, y cada año hay venta anticipada a través de la página www.tulipanespatagonia.com.ar, para reservar con tiempo y acceder a un costo un poco menor, antes de que la temporada arranque» señaló el hombre.
Por esa entrada se puede pasar el día entero recorriendo los cultivos, e incluso volver al día siguiente para seguir gozando de esa desconexión que ofrece el lugar.
«También armamos un centro de interpretación. Proyectamos un video de ocho minutos dónde le contamos a la gente los secretos del cultivo, porque nosotros arrancamos a trabajar en el campo mucho antes del inicio de la primavera» relató Juan Carlos.
A eso se suma una confitería construida en la parte más alta del campo, que, más allá de las cosas ricas que vende para consumir, oficia a modo de mirador.
«En el campo también hay puestos con venta de alfajores artesanales y otras delicias» agregó el productor, aunque aclaró que «no es obligatorio comprar nada, cada uno puede armar su recorrido a medida. Podés llevarte el mate y la reposera. La idea es pasarla bien en ese entorno que invita» dijo.
Para llegar se puede viajar directamente, ya sea en auto, taxi o transporte público desde el centro de Trevelin.
Los colectivos de la firma Jacobsen salen todos los días de octubre a las 10′ y a las 14:15 ‘. Regresan del campo 14:45′ y 19’. Para tomar estos micros, no es necesario reservar.
Si la idea es aprovechar a fondo el resto de los atractivos de la zona también se puede optar por contratar el paseo con alguna empresa de excursiones, que lo ofrezca a modo de paquete de actividades.
Es que este atractivo forma parte del circuito de la Ruta Galesa, una excursión que abarca las Cascadas Nant y Fall y la imperdible bodega Viñas de Nant y Fall.
Entre esas posibilidades, también, está la visita a alguna de las tradicionales casas de té, que, con la tradición galesa más vigente que nunca, ofrecen blends de la infusión y una selección de ricuras dulces y saladas, para deleitarse con la cultura de la región.
Mejores fechas para ver los tulipanes
La temporada de floración dura un mes, que permite apreciar en plenitud ese estallido de tonalidades que conforman las distintas líneas de cultivo, agrupadas de tal manera qué, año a año, se arma un degradé de colores que varían, para asombrar a los que ya tienen por hábito visitar la magia que ocurre en ese campo, al pie de la montaña.
«El lapso oficial arrancó el 7 de este mes y estará vigente hasta el 7 de noviembre. Lo recomendable es venir después del 10, porque ya hay muchísimas líneas de flores abiertas. La floración depende del clima y de las temperaturas reinantes. Por eso la naturaleza hace lo suyo y los tulipanes van arrancando y después declinan. Nunca están las líneas completas al 100%, pero sí hay muchísimas abiertas al unísono, por eso ese efecto de colores vibrantes está asegurado» explicó el experto.
Viajar en globo sobre el mar de tulipanes, un sueño
Pero si te parecía fascinante lo que leíste hasta acá, agendá lo que podés sumarle. Es que si querés meterte dentro de una escena de cuento y sobrevolar en globo ese campo estallado de color, podrás hacerlo. Porque una firma ofrece vuelos en globos aeroestáticos, que son controlados, porque sólo se elevan y recorren el campo de tulipanes, sin dejar librado al azar el paseo, para que la aeronave no se eleve y distancie hasta zonas alejadas.
«La modalidad de vuelo se llama ‘cautiva’. Esto quiere decir que el globo recorre unos 20 metros y vuelve a bajar sobre el lugar. Dura 10 minutos. Tiene un costo de 100 dólares (casi $100.000 al cambio actual) por pasajero (los niños pagan la misma tarifa, desde los 4 años) y la disponibilidad de días y horarios depende del clima. Con tres jornadas de anticipación nosotros armamos el cronograma» explicó Karin, que es la titular de la firma que ofrece la actividad.
Actualmente hay un globo disponible, que tiene una canasta apta para dos pasajeros (también podrían viajar un par de personas y un niño). La semana próxima se incorporará otro, con una canasta apta para 5. Para informes, el celular es (2945) 59-4395.
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