Exigen explicaciones por la falta de la señalización de la Federal como Sitio de Memoria en Neuquén
La delegación Neuquén de la policía Federal fue señalada en 2015 con una cartelería que marcó su funcionamiento en el circuito de represión durante la última dictadura cívico militar
Aquí funcionó un centro clandestino,decia la cartelería que no está (foto gentileza)
La APDH de Neuquén reclamó la urgente intervención de Nación ante el retiro del señalamiento de la delegación de la Policía Federal de Neuquén como centro clandestino de la dictadura. La descripción del lugar como un sitio donde se cometieron delitos de lesa humanidad se determinó por ley y en 2015 se instaló un cartel con la descripción de Sitio de Memoria.
El organismo requirió la intervención «urgente» ante el retiro del señalamiento de Santiago del Estero 136 de Neuquén capital, en la vereda de la Policía Federal.
«Es imperioso saber quiénes son los responsables de haber retirado las láminas que hacían referencia a lo ocurrido durante el Terrorismo de Estado en ese espacio«, se indicó.
En la vereda, quedo la estructura de metal y falta toda la referencia
La APDH recordó la vigencia de la ley 26691 que creó la figura de los Sitios de Memoria para consignar los lugares utilizados por las fuerzas nacionales y provinciales donde se cometieron hechos aberrantes, como secuestros, torturas y desaparición de personas.
El organismo destacó que aún hoy, en el juicio que se desarrolla en Neuquén contra el ex juez federal de la dictadura, Pedro Duarte, y el ex fiscal Víctor Ortiz, se conocen revelaciones del papel que cumplió esa dependencia federal que, desde que comenzaron los juicios de lesa humanidad en Neuquén en el 2008 «demostraron cómo funcionó el circuito represivo estatal».
En el alegato fiscal de la semana pasada, el fiscal Miguel Palazzani, recordó que en el lugar fueron detenidos ilegalmente y sufrieron tormentos Orlando «Nano» Balbo, Onofre Mellado, Eduardo Buamscha, los hermanos Pailos, Orlando Cancio, Javier Seminario Ramos, Alicia Figueira de Murphy, Darío Altomaro, Susana Mujica, Alicia Pifarré, Cecilia Vecchi (desaparecidas las tres), Lucio Espíndola, Carlos Kristensen, Francisco Ledesma, María Cristina Lucca, Luis Almarza, Juan Isidro López, María Cristina Parente, Néstor Sáez, Alicia Villaverde y Pedro Justo Rodríguez, entre otras víctimas cuyos casos se acreditaron en sentencias judiciales.
La delegación de la Policía Federal fue parte del circuito de represión y enlace con la justicia federal, según se precisó en la instancia de juicio a los civiles que actuaron durante la dictadura, en tanto los militares contaban con la dependencia para el funcionamiento del plan criminal que se llevó a cabo a partir del 24 de marzo de 1976.
En marzo de 2015 se llevó a cabo el señalamiento en la vereda de la delegación federal de la policía, mientras que un año antes, como parte de una inspección judicial, uno de los sobrevivientes de las cárceles de la dictadura, reconoció la mesa de torturas que aún permanecía en la vivienda como parte del inventario de la institución.
En noviembre de 202, el señalamiento del centro clandestino «La Escuelita» fue robado detrás del Batallón neuquino. Fue un llamativo robo de la estructura, en Lanin y Chaco, para el que se requirió de un trabajo con al menos una herramienta de amoladora o similar que cortara la estructura de hierro que apuntalaba la cartelería, con una base de cemento enterrada en el veredón de ripio.
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