Apoyo a la extensión del RIGI para la importación de equipos

El gobierno neuquino analizó las razones por las cuales los equipos de perforación requieren de condiciones especiales para su importación.

El Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) fue reglamentando recientemente por el gobierno nacional, pero con la novedad de dejar fuera de su alcance a varios sectores, como es la extracción de petróleo. Otro de los puntos que no se contempló es la importación de los equipos especiales, como los de perforación, que se necesitarán para elevar la producción de gas de cara a la exportación de GNL.

Este punto ya comenzó a ser solicitado por las empresas de servicio y sumó en estos días el apoyo de la provincia de Neuquén desde donde se explicó que un perforador -o rig en la jerga- tiene un costo de 40 millones de dólares, por los cuales se pagan 12 millones de dólares de aranceles a la importación y además un costo de traslado de 7 millones de dólares, sumando así un sobrecosto de casi el 50% de su valor.

“Los equipos de perforación no son el segmento más rentable encima, y son lo que más se necesita para poder elevar la producción”, se planteó desde el gobierno neuquino a la vez que se recordó que “casi todos los países petroleros de la región, como Brasil o Colombia, tienen regímenes de importaciones diferenciales, porque sino estos sobrecostos te dejan afuera”.

Desde las empresas del sector se viene planteando al gobierno la incorporación de la importación de este tipo de equipos dentro de los beneficios del RIGI, ya que si bien el plan de incentivos fija como condición una inversión que en general no baja de los 200 millones de dólares, eso implica solamente unos 5 equipos.

En la actualidad, son 37 las torres de perforación que están activas en Vaca Muerta, una cantidad que está prácticamente congelada y con la amenaza de cortes por falta de reparaciones, y que ya se está traduciendo en una caída en la cantidad de etapas de fractura que se realizan para poner en producción los nuevos pozos, dado que los sets de fractura sí se han incremetando y no así los perforadores.

Además de este pedido de extensión de los beneficios, desde el gobierno neuquino también se señaló una serie de regulaciones que agregan costos al trabajo en la zona, perjudicándolo. Uno de estos puntos es la prohibición de la importación de una serie de equipos especiales si éstos son usados.

Pero sin dudas el más curioso es el que prohíbe a los camiones de los sets de fractura poder circular por sí mismos en rutas y calles, durante sus primeros seis meses en el país. “No hay mejor definición de sobrecostos que tener que llevar un camión arriba de otro camión”, plantearon.


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