Rolando Figueroa pisó el gasto en Neuquén y cerró con superávit el primer semestre
El gobierno volvió a aplicar la política de contención para que los desembolsos no crezcan por encima e los ingresos. El resultado financiero fue de 272.469 millones de pesos.
Rolando Figueroa cerró el primer semestre con superátiv. Foto: Matías Subat.
El gobernador Rolando Figueroa cerró su primer semestre al frente de la provincia con superávit, ayudado por los ingresos de regalías y recaudación que se mantuvieron a flote y creciendo por encima de la inflación del período. Según los datos oficiales (provisorios) que publicó el ministerio de Economía, el gobierno obtuvo un resultado financiero al 30 de junio de 272.469 millones de pesos.
De esta forma, logró mantener la tendencia que había obtenido en el primer trimestre del año, cuando también registró un resultado superavitario sobre las cuentas de la provincia.
Los ingresos totales fueron de casi 1,9 billones de pesos, mientras que los gastos se ubicaron en 1,6 billones, incluyendo el Instituto de Seguridad Social del Neuquén (ISSN).
Si se miran los datos desagregados, los ingresos corrientes totalizaron poco más de 1,89 billones de pesos, de los cuales el 35% correspondió a regalías de gas y petróleo e hidroeléctricas. Como explicó Diario RÍO NEGRO días atrás, estos recursos son los de mayor peso en la canasta que recibe la provincia mes a mes, seguidos por la recaudación propia. Los envíos de coparticipación nacional y regímenes especiales, en cambio, se mantienen a la baja por el retiro de financiamiento y también por la merma en la recaudación de impuestos como el IVA.
Los ingresos de capital no movieron la balanza: fueron apenas 2.238 millones en todo el semestre.
En cuanto a los gastos, los corrientes fueron algo más de 1,55 billones de pesos. Los gastos de consumo se llevaron la mayor parte, con 947.994 millones de pesos de los cuales 849.238 millones (el 90%) fueron salarios.
En intereses de la deuda pública Figueroa gastó en el semestre 48.567 millones de pesos, mientras que al pago de contribuciones de la seguridad social destinó 311.943 millones y, a transferencias corrientes, 248.989 millones. Este concepto incluye los subsidios a privados y la coparticipación y otros envíos que se hacen a los municipios.
Los gastos de capital fueron 69.148 millones en el semestre.
El superávit que consiguió Figueroa en la primera parte del año tiene como principal explicación que los ingresos subieron más que los gastos en la comparación con el 2023.
La variación interanual nominal de los recursos corrientes, si se la compara con el primer semestre del 2023, fue del 294% frente a una inflación del orden del 280%. Es decir, Figueroa recaudó impuestos y regalías por encima de lo que fue la suba de precios.
En cambio, volvió a aplicar una política de contención del gasto para que ninguna de sus partidas crezca más que los ingresos. Las transferencias corrientes fueron las que más aumentaron en el semestre, un 251%, mientras que los sueldos de los estatales lo hicieron en un 240%. Otros ítems quedaron aún más abajo: 154% fue la suba interanual de los bienes de consumo mientras que los servicios no personales crecieron solo 142% en comparación con el año pasado.
Figueroa viene planteando desde que asumió que su política es “ordenar el Estado” con el objetivo de hacer una mejor redistribución de los recursos que tiene Neuquén. “No sirve ordenar para no redistribuir absolutamente nada. Hay que ordenar y borrar las injusticias. La forma de redistribuir es otorgando oportunidades para los que menos tienen”, planteó en uno de los últimos actos.
El gobierno aún tiene pendiente volcar recursos significativos en obra pública, que en el primer semestre de este año se mantuvieron prácticamente pisados. La promesa es de reactivar proyectos con financiamiento internacional de organismos de crédito y recursos propios.
El gasto en obra pública sólo subió un 77% interanual
Los números del primer semestre mostraron el freno que el gobierno de la provincia le puso a la obra pública en Neuquén con la renegociación de contratos y la búsqueda de financiamiento para compensar la quita de envíos de Nación.
Entre enero y junio de este año, el gobierno de Rolando Figueroa acumuló gastos de capital por 69.148 millones de pesos, apenas un 77% más de lo que había desembolsado su antecesor, Omar Gutiérrez, en igual período.
En el desagregado por categorías, el primer semestre de 2024 terminó con una inversión real directa (construcciones, maquinarias) de 40.836 millones.
El gobierno consiguió ahora aval para tomar un préstamo internacional de CAF por 100 millones de dólares que es el que usará para iniciar nuevas obras de pavimentación de rutas y plantas de agua.
Casi la mitad de los gastos corrientes son salarios
El resultado del primer semestre de la era Rolando Figueroa lució mejor que el del 2023, aunque mantiene algunas constantes como es el peso de la masa salarial sobre los gastos corrientes.
De enero a junio, el gasto en personal fue de 849.238 millones de pesos, muy por encima de lo que había estimado el presupuesto, que totalizaba para el año 1 billón en ese concepto. Esti se explica porque el cálculo, como era habitual en los presupuestos de la gestión de Omar Gutiérrez, no incluía una previsión de incrementos salariales.
Figueroa negoció con los sindicatos estatales continuar con las subas salariales atadas a la inflación. Es decir, además del 40% de aumento que tuvo que desembolsar por el último trimestre de la negocación anterior, otorgó otro del 25,67% por el acuerdo de febrero y marzo (por enero dio una suma fija) y otro 19,9% correspondiente al segundo trimestre.
Su gestión aún debe encarar lo que arroje el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del trimestre julio-agosto-septiembre y el último correspondiente a octubre-noviembre-diciembre.
Este primer semestre del 2024, el gasto en sueldos representó poco más del 45,4% del total de gastos corrientes. La cifra quedó apenas un punto abajo respecto del mismo período del 2023, cuando se gastó en salarios la suma de 249.338 millones de pesos, un 46,5% de los gastos corrientes.
Si se evalúa en función de los ingresos que tiene Neuquén, este semestre alcanzó y sobró con las regalías de gas y petróleo más los envíos de origen nacional para pagar los sueldos de los trabajadores estatales.
Este paquete representa un 50% del total de ingresos corrientes que tiene la provincia, cuyo grueso restante corresponde, principalmente, a la recaudación propia por el pago de impuestos.
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