Río Negro prepara fuerte operativo de fiscalización laboral en Bariloche

Como cada año, intensificarán los controles en coincidencia con la temporada turística, con el foco puesto en la hotelería, la gastronomía y en el cerro Catedral. Hay inspectores específicos para el trabajo no registrado y otros para "seguridad e higiene".

Con la llegada a Bariloche de 15 inspectores de otras localidades, la secretaría de Trabajo de Río Negro desplegará un operativo especial para detectar y sancionar empleo no registrado y otras irregularidades laborales.

La secretaria del área, María Avilez, dijo que se trata de un plan de trabajo que se desarrolla en todas las temporadas altas de turismo y que el foco estará puesto en la gastronomía, la hotelería y el comercio, tanto en el centro de la ciudad como en el cerro Catedral.

Señaló que en lo relacionado específicamente con las condiciones de contratación y registro del personal tienen previsto empezar el 22 de julio, en coincidencia con el mayor flujo de turismo. Pero para la fiscalización puntual de seguridad e higiene la campaña “preventiva” ya se inició en junio, con intimaciones para que los empleadores adecuen lo que esté en falta y cumplan con la legislación.

Los operativos se cumplen con aval y acompañamiento gremial, según indicó la funcionaria. El secretario general del sindicato gastronómico, Nelson Rasini, dijo que ya efectuaron varias verificaciones conjuntas para garantizar el cumplimiento de exigencias como la provisión de ropa y calzado para los trabajadores de Catedral y la verificación de las cocinas y otros lugares de trabajo.

En cuanto al empleo “en negro”, Rasini dijo que año tras año se afinan los controles y permitieron lograr algunas mejoras en el índice general de registración. “No es difícil, porque el alta de Afip se tramita en forma sencilla e inmediata”, afirmó.

Cerrarle el paso al fraude laboral

Una de las faltas más usuales es la de contratar empleados que figuran por “media jornada”, cuando en realidad realizan jornadas completas. Y por eso la revisión de libros y planillas de horarios es determinante.

Cuando detectan una infracción los empleadores pueden adecuarse y generar la habilitación de AFIP en la fecha real de ingreso. De otro modo avanza el expediente que termina en la imposición de multas.

Rasini dijo que durante el gobierno de Arabela Carreras lograron adecuar la normativa para mejorar los tiempos de descargo de las empresas, que bajaron de 120 a 60 días. Dijo que hasta entonces las sanciones “muchas veces llegaban tarde porque ya se había terminado la temporada”.

Refirió que “trabajo irregular hay siempre, por eso hay que estar encima” y consideró preocupantes los cambios impuestos por el gobierno nacional para eliminar sanciones a los infractores. “Va a ser fatal. Si antes había empresas que no cumplían, a pesar de las multas, ahora se las perdonan y va a ser peor”, vaticinó.

El dirigente gremial valoró que Trabajo dedique especial atención a Catedral, porque en invierno se concentra allí una importante actividad comercial y de servicios, “pero también está previsto hacer un barrido por toda la ciudad”.

Dijo que en la hotelería logran en general buena respuesta, pero “lo más difícil son las cabañas, porque suele ocurrir que esconden a los trabajadores, o que se declaran como emprendimiento familiar, sin empleados. Todo eso hay que comprobarlo”. También es un problema la proliferación de departamentos de alquiler no habilitados, porque allí los inspectores no tienen atribuciones para ingresar y pedir documentación.

Mantener y profundizar el control

Avilez dijo que los equipos preventivos en materia de seguridad e higiene laboral “ya estuvieron en la calle” el mes pasado y ahora se aprestan a salir una vez más para chequear los cambios e infraccionar a los incumplidores.

Dijo que el eje de los controles tiene que ver con “las condiciones edilicias, las instalaciones eléctricas y la salubridad”. Explicó que son varios los hoteles y restoranes que “estuvieron en obra” durante la temporada baja de turismo y es necesario chequear las nuevas instalaciones.

La funcionaria dijo que en el verano ya realizaron “un trabajo muy fino” con el gremio gastronómico y que el índice de registración laboral comprobado llegó al 92%. “Vamos a ver cómo está ahora, es posible que nos encontremos con otra realidad”, afirmó.

Señaló que aquellos empleadores que no pasen los controles se exponen a ser multados. Las sanciones económicas son altas y dependen de la cantidad de trabajadores no declarados y de la fecha de ingreso.

Rasini, en representación de la Uthgra, valoró el interés de Trabajo en reforzar el control en temporada, pero se quejó de que la estructura permanente de la secretaría en Bariloche es muy acotada. Dijo que son cinco los inspectores de seguridad e higiene “pero laborales solo hay dos” y reciben pedidos constantes de inspección por parte de Gastronómicos, Comercio y la Uocra, entre otros gremios con miles de afiliados. “Así como esdtán, no pueden cumplir con todo”, admitió.


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