Proponen jornadas institucionales fuera del horario escolar en Neuquén: qué dijo ATEN
La iniciativa presentada por la diputada provincial Gisselle Stillger busca modificar el formato actual de las jornadas para que no impacten en la cantidad de días de clases. Desde el gremio docente salieron al cruce.
Proyecto para que las jornadas institucionales no sean en horario escolar. Foto: archivo Matías Subat.
Un proyecto de resolución ingresó este jueves a la Legislatura de Neuquén con la propuesta de que las jornadas institucionales en los establecimientos educativos de la provincia no impliquen pérdida de clases para los estudiantes.
Así lo planteó al menos la diputada provincial por Arriba Neuquén Gisselle Stillger, autora junto a su par Mercedes Tulián de la iniciativa que ya generó revuelo y rechazo en ATEN, el gremio que representa a los docentes neuquinos.
«Es un proyecto de resolución, es decir establece comunicaciones a distintos organismos«, explicó la legisladora en diálogo hoy viernes con RIONEGRO RADIO.
Dijo que, en este caso, se «insta al Consejo Provincial de Educación a que realice las acciones necesarias para que las jornadas institucionales del próximo año sean en días y horas de la semana que no signifiquen pérdida de clases«.
Según la diputada, con esta propuesta se busca un «calendario educativo que se acerque a los 190 días de clases», lo que redundaría en «muchos beneficios» para la «continuidad de los conocimientos y su incorporación en forma gradual».
El objetivo, dijo Stilger, es «poner el foco en el alumno», que además de «escuelas en condiciones», necesita la totalidad de los días de clases.
Sostuvo que en el actual calendario escolar son 11 las jornadas institucionales en Neuquén, cifra que duplicaría al promedio nacional de 5 y contrastaría con lo que sucede en otras provincias, donde las jornadas «no implican que se pierda» tiempo de aprendizaje en las aulas.
Consultada en el programa «Ya es tiempo» sobre los plazos para el tratamiento del proyecto, adelantó que recién podría empezar a analizarse en octubre, tras el receso invernal, las semanas para trabajar en comisiones y los primeros trazos de la agenda educativa que en esas instancias se defina.
«Es una forma de decirle al CPE que no estamos en contra de las jornadas, sino de que hay que buscarle una forma creativa para que estas puedan llevarse a cabo fuera del horario escolar» y los docentes, por ejemplo, no tengan que «dar todo de forma apurada».
De todos modos, recordó que serán el Consejo y el ministerio provincial de Educación, hoy a cargo de Soledad Martínez, los que tendrán la potestad de tomar o no esta medida, porque son ellos los que se encargan de la administración del sistema educativo. Señaló sin embargo que desde la cartera provincial también se está trabajando en una forma para rever el funcionamiento integral de las jornadas.
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Jornadas fuera de horario escolar y cruce de ATEN
El gremio docente ATEN publicó este viernes un comunicado para cuestionar el impacto de este proyecto, al que consideró como como un «nuevo ataque» a los trabajadores de la educación en Neuquén.
Manifestaron que las «jornadas atacadas» son instancias necesarias en las que se abordan precisamente «problemas institucionales, en tiempo institucional», por lo que agregar horas o nuevas jornadas a las establecidas «está por fuera de nuestra jornada laborar y carga horaria y resulta una precarización, flexibilización y agravamiento de las actuales condiciones de trabajo docente«.
Plantearon en esa línea que «eliminarlas, hacerlas optativas, o ponerlas fuera del horario escolar/jornada laboral, tiene además impacto pedagógico», afectando «el abordaje de proyectos institucionales, seguimientos de trayectos de los estudiantes, debate y definición de estrategias vinculados con la inclusión de estudiantes con discapacidad, entre otras múltiples situaciones que no se pueden atender, discutir ni resolver en lo cotidiano de la dinámica escolar«.
«Quienes proponen esto desconocen el funcionamiento de las escuelas, y las condiciones y tiempo de trabajo docente. La tarea docente tiene un límite difuso entre escuela y hogar, por el inexistente espacio institucional para planificar, corregir y diseñar estrategias didácticas que garanticen el trabajo con las diversidades que caracterizan nuestros grupos de estudiantes», señalaron.
Por todo esto, expresaron su rechazo a lo que definieron como un «nuevo intento de estigmatizar y descalificar nuestro trabajo y defendemos estas Jornadas como un espacio para la construcción de respuestas a las problemáticas pedagógicas, administrativas e institucionales«.
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